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Los expertos consideraban que estas eran unas elecciones predecibles. Autor: USNews Publicado: 21/09/2017 | 05:58 pm
WASHINGTON, noviembre 4.— Un total de 206 millones de estadounidenses conformaban el electorado de las legislativas del martes en Estados Unidos, pero solamente 145 millones estaban registrados para votar, según los datos de la Oficina del Censo, y de los registrados fueron muchos los ausentes a las urnas.
Si bien los resultados finales se conocerían en la madrugada de este miércoles, ya cerrada nuestra edición, desde horas tempranas el presidente demócrata Barack Obama expresó en una intervención radiofónica cuando esperaba los resultados de las elecciones de medio término que «existen muchos estados en vilo que tienden hacia los republicanos».
Para los demócratas es el peor frente desde los tiempos de Dwight Eisenhower, aseveró el mandatario, informó ANSA.
Según EFE, en la tranquila jornada los pronósticos eran favorables a los republicanos, cuya aspiración era «tumbar» en estas elecciones a la mayoría demócrata en el Senado y ponérsela difícil al presidente Barack Obama en sus últimos dos años de mandato.
Además de la batalla por el control del Senado, que ponía a votación 36 de sus 100 escaños y era el centro de la atención mediática, se votó también sobre la totalidad de los 435 miembros de la Cámara de Representantes, los gobernadores de 36 de los 50 estados y una parte de los legisladores locales.
Los últimos sondeos dan a los republicanos, además de las victorias seguras en Montana, Dakota del Sur y Virginia Occidental, muchas probabilidades de imponerse en estados disputados como Arkansas, Colorado y Louisiana, con lo que sumarían los seis escaños que les faltan para ser mayoría en el Senado, agregó EFE.
Pese a todo, el vicepresidente de EE.UU., Joe Biden, predijo este lunes que los demócratas mantendrán el control del Senado, un pronóstico que comparte el propio Obama, según dijo el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.
Una buena noche para los demócratas pasa necesariamente por ganar en Carolina del Norte y Nuevo Hampshire. Si se imponen allí, puede ser determinante para ambos partidos lo que ocurra en Alaska, donde el recuento de votos puede durar varios días, debido a que la contienda está muy igualada y a la gran extensión de ese estado, apuntaba EFE.
El control del Senado puede quedar en el aire incluso hasta enero si las reñidas carreras en Luisiana y Georgia obligan a celebrar una segunda votación en esos dos estados.
En ambos, los candidatos en liza necesitan hacerse hoy con al menos la mitad más uno de los votos para ganar y evitar una segunda vuelta, que en el caso de Georgia no se celebraría hasta el 6 de enero, tres días después del inicio del nuevo periodo de sesiones del Congreso.
Estas elecciones de medio tiempo han sido hasta el momento las de mayor gasto acumulado por candidatos y partidos políticos: 3 670 millones de dólares, por encima de los 3 630 millones de 2010, según un estudio de la organización independiente Center for Responsive Politics.
