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El mensaje del presidente Barack Obama a su homólogo ruso, Vladimir Putin, por mediación del consejero de seguridad nacional Thomas Donilon refleja una contradicción en la política de Estados Unidos respecto a Rusia, informa PL.
Donilon, quien llegó ayer a Moscú en una visita de dos días, entregó este lunes a Putin una misiva de Obama, cuyo contenido no se hizo público.
Sin embargo, el gesto del titular de la Casa Blanca ha sido recibido en Moscú con posiciones encontradas, principalmente luego de la publicación el viernes por el Departamento norteamericano de Estado de la llamada lista de Magnitsky, con nombres de funcionarios rusos, a quienes se le prohíbe la entrada a Estados Unidos.
Al respecto, el ayudante presidencial Yuri Ushakov, dijo que aparte de esa carta de Obama recibimos en estos días una hoja con 18 apellidos, a la cual hemos reaccionado de manera similar.
A su juicio, es evidente que por una parte la administración de Obama quiere desarrollar con nosotros las relaciones en muchas direcciones, lo cual es positivo, subrayó, y por otra parte, no quiere luchar por nuestra cooperación bilateral al interior de Estados Unidos, no quiere acorralar a algunos de los rusófobos que ponen obstáculos a la colaboración, aseveró Ushakov.
El asesor presidencial en política exterior dijo a la prensa que Putin participó en las negociaciones, celebradas con Donilon en Kremlin, sin ofrecer otros detalles al margen del mensaje de Obama, reportaron las principales agencias rusas.
Por su parte, el canciller Serguei Lavrov afirmó que la lista antirrusa Magnitsky, los problemas con los niños adoptados, el trato a los ciudadanos rusos, el secuestro de connacionales y la violación de sus derechos civiles constituyen factores negativos para las relaciones bilaterales.
Lavrov indicó que tanto John Kerry como Donilon entienden el efecto irritante y nocivo de estas cuestiones en los vínculos ruso-norteamericanos, y prometieron la adopción de medidas para eliminarlos.
Vamos a juzgar por los hechos y no por las palabras, aseguró el ministro de Asuntos Exteriores, en declaraciones a la prensa.
Para el titular del comité de Relaciones Internacionales de la Duma (cámara baja), Alexei Pushkov, el consejero de Obama será el primero en sentir las consecuencias de la aplicación por Estados Unidos de las listas negras, consideradas por Moscú una injerencia en los asuntos internos.
En las conversaciones oficiales en el Kremlin participaron además de Donilon, la subsecretaria de Estado para el control de armamentos estratégicos y seguridad internacional, Rose Gottemoeller; y el subsecretario de Defensa Jim Miller.
Por la parte rusa asistieron el secretario del Consejo de Seguridad Nikolai Patrushev; el ayudante del presidente Yuri Ushakov, el vicecanciller Serguei Ryabkov; y el viceministro de Defensa Anatali Antonov.
Al margen de los contenidos discordantes acumulados en las relaciones ruso-norteamericanas, la visita del consejero de la Casa Blanca fue preparatoria al encuentro que sostendrán Putin y Obama a mediados de junio, durante la cumbre del G-8, en Irlanda del Norte.
