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DAMASCO, diciembre 30.— Los sirios escenificaron hoy masivos actos de apoyo al gobierno del presidente, Bashar al-Assad, la unidad nacional y de rechazo a la violencia terrorista, en numerosas ciudades y poblados de todo el país.
Desde la capital, poblaciones de Damasco Campo, hasta las urbes de Aleppo, en el norte; Homs, en el centro; Lattakia y Tartous, en el sur; Sweida, en el sudeste, y Hassake, en el nordeste, y otras comunidades fueron escenario de manifestaciones populares, en este viernes de oraciones musulmanas.
La gente tras acudir a las mezquitas, aquellos que son musulmanes, más cristianos, drusos, alauitas, todos, salieron a las plazas de sus localidades donde mostraron, según las imágenes de la televisión siria, su reafirmación en defensa de la unidad y la concordia nacional, ante la hostilidad que centros de poder extranjeros han impuesto a la nación siria.
Las consignas en todas las espontáneas concentraciones giraron en reiterar la determinación de los sirios de enfrentar lo que consideran la conspiración extranjera contra su patria.
Anoche, la Plaza Al-Mohafazat, en Damasco, se llenó de una entusiasta multitud con banderas para expresar su respaldo al gobierno de al-Assad; hoy son otros sitios donde los capitalinos dan muestras de apego a la unidad nacional y condenan la violencia terrorista.
Dos atentados suicidas terroristas del 23 de diciembre, sin precedente en esta milenaria ciudad, ocasionaron 44 muertos y 166 heridos.
En una crónica, la agencia de noticias SANA describe que los participantes en las manifestaciones corearon lemas que reflejaron la voluntad del pueblo sirio, su sinceridad en el respaldo a sus líderes y que están dispuestos a enfrentar todas las presiones y campañas tendenciosas contra la seguridad y estabilidad del país.
Entrevistados por otros medios, los manifestantes llamaron a la misión observadora de la Liga Árabe a realizar un trabajo creíble y profesional, que revele los hechos cometidos por los grupos terroristas, como asesinatos de personas inocentes, atemorizando al pueblo y saboteando propiedades públicas y privadas, dijeron.
Instaron a los observadores a que develen las mentiras y fabricaciones que hacen varios canales y expongan su implicación en el derramamiento de sangre siria a causa de su tendenciosa e inflamatoria campaña mediática.
La televisión siria presentó anoche a otro cabecilla de una de las bandas terroristas, identificado como Nasser Salah al-Din al-Tal, quien confesó que él y su grupo dispararon contra manifestantes en el pueblo de al-Zabadani, en Damasco Campo, para acusar de tal crimen al Ejército y a las fuerzas de seguridad.
Luego de admitir la comisión de múltiples crímenes, al-Tal detalló cómo y de dónde a través de la frontera con el Líbano les llegaba el apoyo financiero, los equipos de comunicación y las armas, entre ellas, fusiles de fabricación norteamericana con miras telescópicas, lanza-cohetes y otros pertrechos bélicos fabricados en Israel.
Igualmente, la televisión presentó a dos taxistas que fueron secuestrados en Homs, y narraron su terrible experiencia hasta ser liberados por las fuerzas de seguridad.
Francia, primero, y después la Unión Europea bloquearon y sancionaron canales de la televisión siria, así como otros medios, cuando estos comenzaron a mostrar las confesiones de cabecillas y miembros de grupos terroristas capturados y revelaron las falsedades que se transmiten en la campaña mediática contra Siria.
