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Científicos trabajan en el desarrollo de la vacuna. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 04:59 pm
Londres, 23 jun (PL) La bacteria Escherichia coli que causó hasta hoy 39 muertes en Alemania, es una combinación de dos cepas con una importante resistencia a los antibióticos y gran capacidad para adherirse a las células del organismo.
En un artículo divulgado en la revista The Lancet Infectious Diseases, expertos alemanes explicaron que el brote provocado por la cepa O104:H4, ha sido tan letal porque se unieron las características más graves de dos variantes del patógeno, la enterohemorrágica (EHEC) -produce la toxina Shiga-, y la enteroagregativa (EAEC).
La capacidad de adherencia de esta cepa en las células epiteliales del intestino podría haber facilitado la absorción por la toxina Shiga y explicar, en parte, el gran número de personas con síndrome urémico (SUH), señalaron los autores del trabajo, de la Universidad de Münster.
«La resistencia que mostraban a los antibióticos también está detrás del alto porcentaje, el 30 por ciento de SUH entre los afectados», indicaron.
Para llegar a estas conclusiones los especialistas analizaron 80 muestras de sangre de pacientes afectados, procedentes de 22 hospitales de 17 ciudades.
Desde principios de mayo se registraron más de 800 casos de SUH -que provoca fallo renal-, de los cuales 39 fallecieron, además se estima que unas dos mil 700 personas padecieron la afección, no solo en Alemania, pues otras naciones de Europa como Austria, Dinamarca, Francia, Grecia, Luxemburgo, Holanda, notificaron infecciones.
Intensas investigaciones se realizaron para determinar el origen del contagio, cuya causa se achacó primero a pepinos españoles, retoños de remolacha roja, hierbas medicinales, lentejas, frijoles y heno griego.
Finalmente se corroboró que la fuente del problema provenía de brotes germinados de soya de una granja orgánica, ubicada al norte de Alemania, aunque algunos especulan que este foco de infección no es el único.
