EL CAIRO, noviembre 19.—Egipto calificó este viernes de «inaceptable» la interferencia de Estados Unidos en sus asuntos internos, al demandar insistentemente la presencia de observadores extranjeros en las elecciones parlamentarias previstas para el próximo día 28, según PL.
Una nota de la cancillería reproducida por medios noticiosos en El Cairo criticó en términos inusualmente enérgicos la postura de la administración del presidente Barack Obama respecto a los comicios para renovar la Asamblea del Pueblo (cámara baja del Parlamento).
«Las últimas posiciones tomadas por la administración hacia los asuntos internos egipcios son algo absolutamente inaceptable. Es como si Estados Unidos se hubiera convertido en velador de cómo la sociedad egipcia debe conducir sus propios temas políticos», indicó el texto.
La agencia oficial de noticias MENA, que reprodujo el comunicado del Ministerio egipcio de Relaciones Exteriores, también citó al titular de Asuntos Legales y Consejos Parlamentarios, Moufid Shehab, cuando rechazó las pretensiones norteamericanas.
Shehab señaló con énfasis que «Egipto no necesita de observadores extranjeros para probar una votación transparente», en línea con el pronunciamiento de la cancillería que consideró la acción de Washington «nociva para la soberanía» de esta nación árabe.
«Parece que Estados Unidos insiste en no respetar la privacidad de la sociedad egipcia y en hacer declaraciones que laceren el nacionalismo de Egipto», agregó el ministerio al advertir que «quien piense que eso es posible, está engañado».
La cancillería aclaró que continuará sus relaciones recíprocas con la nación norteña en la misma medida que ésta muestre respeto mutuo hacia Egipto, deplorando así declaraciones del Departamento de Estado y de diplomáticos norteamericanos que pedían supervisar la votación.
El ex embajador estadounidense en El Cairo Edward Walker exigió al gobierno del presidente Hosni Mubarak permitir el monitoreo internacional de la consulta legislativa para asegurar -dijo- "mayor transparencia", tal como propone la oposición egipcia.
Entretanto, la Comisión Suprema Electoral (CSE) reiteró que los miembros de las organizaciones no gubernamentales nacionales que monitoreen los comicios no podrán estar vinculados a ninguno de los cinco mil 181 candidatos ni afiliados a partido político.
Los autorizados a supervisar pueden entrar a los centros de votación sólo con permisos del jefe de la CSE o de comités secundarios, y podrán reportar violaciones a los funcionarios responsables, pero no interferir en su trabajo ni pedir aclaraciones.