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TEGUCIGALPA, octubre 15.— El denominado diálogo entre los representantes de Manuel Zelaya y el régimen de facto seguía sin arrojar luz este jueves y, según el coordinador del Frente de la resistencia, Juan Barahona, experimentaba un retroceso luego de que, la víspera, se anunciara la existencia de consenso en varios puntos, y un texto común relacionado con la devolución de la presidencia al mandatario.
Sin embargo, este jueves, Barahona dijo que «Hemos retrocedido. Prácticamente estamos en cero». Según el líder popular, Micheletti no aceptó lo que tentativamente se había pactado en la mesa de negociación con respecto a Zelaya, lo que invalida el resto de los acuerdos, porque todo pasa por la restitución del mandatario.
Aunque este día 15 vencía el plazo dado por las fuerzas populares y Zelaya, este dijo desde la Embajada de Brasil que estaba dispuesto a continuar el diálogo, pero reiteró su desconfianza por la falta de voluntad del régimen de facto.
A su llegada a Cochabamba, donde participará en la Cumbre del ALBA, la canciller Patricia Rodas declaró que esperarían hasta las doce de la noche, y reclamó un bloqueo total y sanciones más fuertes contra los golpistas. Interrogada por la prensa, Rodas afirmó que, si no hay acuerdo, realizarán acciones para que no se reconozcan las elecciones de noviembre ni al gobierno que surja de ellas.
Consecuentes con su anuncio de que se mantendrán en la manifestación pacífica, los hombres y mujeres de la resistencia volvieron a movilizarse y realizaron un nuevo plantón en las afueras del hotel donde se celebran las conversaciones.
«Nuestra posición sigue firme, esta resistencia no se rinde, por eso sigue en las calles exigiendo la restitución del presidente Zelaya y de la democracia», indicó el dirigente campesino, Rafael Alegría, a EFE.
En la noche, Alegría anunció que los golpistas habían pedido un nuevo plazo, hasta este viernes.
