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En nombre de Dios, soldados de la patria hondureña, policías... les pido, les suplico y les ordeno: ¡No repriman más al pueblo hondureño!
Así llamó el presidente constitucional de Honduras, Manuel Zelaya, a los soldados y policías de su patria que reprimieron las manifestaciones pacíficas pidiendo su regreso en la tarde del domingo en las inmediaciones del aeropuerto internacional de Tegucigalpa.
En conferencia de prensa desde El Salvador, país al cual llegó procedente de Managua, Nicaragua, luego de que los militares impidieran su aterrizaje en Honduras colocando obstáculos en la pista del aeropuerto, Zelaya manifestó su profundo pesar por las muertes causadas por la represión militar.
“Una marcha pacífica fue reprimida a balazos. Hasta hace seis días las manifestaciones eran reprimidas a culatazos... pero hoy se atrevieron a disparar... hoy una persona joven falleció víctima de los disparos de un criminal, que usa el uniforme para quitarle la vida a una persona que tenía un futuro en nuestra patria”, expresó con dolor Zelaya.
“Yo llamo a los soldados de la patria, que nacen de la propias entrañas del pueblo, a que no apunten a su pueblo”, enfatizó el presidente hondureño.
Los llamo con el grito de guerra de Francisco Morazán, enfatizó, y subrayó: ¡Soldados, bajen sus fusiles en contra del pueblo!
“Soldados hondureños, ustedes son hijos de las propias entrañas del pueblo, no apunten sus rifles en contra de sus hermanos”, les recordó el mandatario constitucional a los militares, quienes con sus acciones ya ocasionaron al menos dos muertos en la tarde de este domingo, entre ellos un joven casi adolescente.
Otra treintena de heridos se contabilizan en los hospitales, mientras que al menos tres personas más murieron entre viernes y sábado en Tegucigalpa y otras zonas del país por culpa de la represión militar.
Zelaya manifestó su solidaridad con las familias de las víctimas y aseguró que hará «los esfuerzos necesarios para que se presenten las condolencias a esta familia de mi parte... trataré de comunicarme por teléfono con ellos».
Este es un acto criminal y no puede quedar impune. Los criminales no pueden dirigir a un país, los criminales no pueden quedar impunes, enfatizó el mandatario constitucional hondureño.
“La policía me conoce, las fuerzas armadas me conocen, y saben que siempre fui incapaz de utilizar la violencia... Siempre he practicado la no violencia... los hondureños me conocen y saben que sería incapaz de levantar ni el pétalo de una rosa contra un ser humano”, recordó Zelaya, al subrayar la diferencia entre la actuación de su gobierno y el del golpista Roberto Micheletti.
“Ningún hondureño puede ser expatriado y yo fui sacado violentamente de mi país mientras dormía”, explicó Zelaya al ratificar que los golpistas violaron y violan constantemente la Constitución de Honduras.
Sobre las manifestaciones, que llegaron a su punto culminante cuando el avión en que viajaba Zelaya junto a Miguel D´Escoto, presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas sobrevoló Tegucigalpa sin poder aterrizar, el mandatario centroamericano expulsado por los militares aseguró que su pueblo fue «reprimido por el hecho de querer vivir en un régimen de respeto, de democracia, donde los actos de violencia no los promueva el estado».
Manuel Zelaya pidió al ejército hondureño que no masacre más al pueblo. Foto: Tomada de la TV Zelaya agradeció al presidente de El Salvador por su hospitalidad, su cariño y sus palabras firmes a favor del verdadero gobierno de Honduras.
Igualmente expresó su agradecimiento a los presidentes de Ecuador, de Paraguay y Argentina, así como al secretario de la OEA José Miguel Insulza y a D´Escoto, de Naciones Unidas, por acompañarlo en un día que consideró histórico.
Al responder a preguntas de los periodistas luego de la conferencia de prensa, Manuel Zelaya explicó que viajaría a Managua, Nicaragua, donde sostendrá encuentros con otros presidentes y líderes de organizaciones del área para valorar los próximos pasos a seguir.
Igualmente explicó que como parte de su apretada agenda de este lunes está previsto un viaje a Estados Unidos para entrevistarse con la secretaria de Estado de ese país, Hillary Clinton, en busca de una salida a la situación ilegal creada por los golpistas.
Hasta el momento la brutal actitud de las fuerzas golpistas han causado al menos dos muertos en las manifestaciones del domingo, aunque dirigentes sociales aseguraron a diversos medios de prensa, entre ellos el canal televisivo Telesur, que hay más de treinta heridos en los hospitales, algunos de ellos en extrema gravedad.
Los manifestantes prevén volver a concentrarse desde horas temprana de la mañana del lunes en plazas céntricas de Tegucigalpa y otras ciudades como San Pedro Sula, para exigir el regreso del presidente constitucional Manuel Zelaya al país y la terminación del asesino régimen golpista.
