23
MOSCÚ.— Rusia esgrimió el miércoles la advertencia de desplegar misiles en Kaliningrado, un enclave en el corazón de Europa, entre Polonia y Lituania, si Estados Unidos rechaza la alternativa del Kremlin al proyecto norteamericano de escudo antimisiles en el este europeo.
«Si nuestras propuestas no son aceptadas, tomaremos las medidas adecuadas. Se encontrará una réplica eficaz», declaró el viceprimer ministro Serguei Ivanov, citado por AFP.
Ivanov dijo claramente que «si nuestras propuestas son adoptadas, desaparecerá la necesidad para Rusia de colocar nuevamente misiles en la parte occidental del país, concretamente en la región de Kaliningrado».
En caso contrario, habrá que «hacer frente a amenazas relacionadas con el despliegue de elementos del escudo antimisiles (de EE.UU.) en la República Checa y Polonia», añadió el ex ministro de Defensa y fuerte candidato para relevar al actual presidente, Vladimir Putin, en 2008.
Hace algunas semanas, Putin sorprendió a la comunidad internacional al proponer que, en vez del proyecto estadounidense de escudo antimisiles en los países ex socialistas (tradicionalmente antirrusos), Moscú y Washington compartan una estación de radar en Azerbaiyán, una iniciativa que no provocó gran entusiasmo en los norteamericanos.
Por otra parte, en este contexto de pugnas entre potencias, el embajador de Estados Unidos en Rumania, Nicholas Taubman, confirmó el miércoles en Bucarest que el ejército de su país pondrá este año en funcionamiento dos bases militares en territorio rumano, reportó EFE.
«Este año se crearán las facilidades militares conjuntas rumano-americanas, símbolo tangible de la alianza sólida entre nuestros países», explicó el diplomático en un comunicado con motivo de la fiesta nacional estadounidense.
Taubman subrayó que los soldados rumanos y estadounidenses «ya luchan juntos contra extremistas en Afganistán e Iraq» y contribuyen a «asegurar la estabilidad» en los Balcanes.
Rumania y EE.UU. firmaron en diciembre de 2005 el llamado «acuerdo de acceso», que permite a Washington instalar bases militares allí.
Bucarest pone a disposición de EE.UU. el aeropuerto militar «Mihail Kogalniceanu», en la costa del Mar Negro, y la base de Babadag, próxima a ese mar. Ambos sitios albergarán las llamadas «facilidades militares» para todos los tipos de armas.
La instalación de bases militares de EE.UU. en el territorio de antiguos aliados de Rusia, contradice el compromiso de la OTAN y Washington con Moscú, de no acercar medios militares de la Alianza Atlántica al territorio ruso, algo que se ha incumplido sistemáticamente y que hace al Kremlin dudar de las «buenas intenciones» norteamericanas con su proyecto de escudo antimisiles en Europa oriental.
