El trono sigue en Bayamo: Granma, campeón de la pelota cubana

BAYAMO.- Tras una épica remontada que pasará a la historia del béisbol cubano como la primera final en la que un equipo gana los juegos seis y siete en calidad de anfitrión, Granma retuvo la corona y se convirtió en tetracampeón de las series nacionales.

Llegaron a esta ciudad de tanto linaje histórico con saldo negativo de 2-3 en la serie ante Matanzas, pero con la convicción de que en el estadio Mártires de Barbados hay que jugar casi perfecto para contener el galope de los Alazanes de Carlos Martí.

Salieron triunfantes en el sexto duelo y este miércoles se presentaron a la grama aupados por miles de aficionados que desde horas tempranas desafiaron el sol y se agolparon en las tribunas amparados por un festival de paraguas y sombrillas que se movían al compás de la conga.

Atacaron rápidamente al pícher zurdo Yamichel Pérez, quien resolvió en el primer inning con un doble play cuando tuvo las bases llenas sin out. Admitió una anotación, que hubiese bastado para definir el choque, pues el experimentado Leandro Martínez caminó siete entradas sin dejar que ningún rival llegara a segunda base.

A sus 43 años cumplidos el martes, Leandro ganó el juego que dio el campeonato a Granma y fue su primera victoria en la final tras otras dos aperturas de calidad, pero no había tenido respaldo de sus compañeros al bate.

Parece que es mi destino, dijo a este redactor en día de su onomástico. Pero mañana quizá ese mismo destino me tenga deparada una sorpresa, un gran regalo, por lo menos ya Carlos (Martí, el mentor) me anunció para trabajar y no quiero irme de la final sin mi victoria.

Fue un trabajo impecable de Leandro (7.0 INN, 5H 1K), rematado por César García, quien consumó la lechada. Si no fueron par de blanqueadas a los Cocodrilos en estos dos últimos juegos se debió a un error en tiro del lanzador Yoel Mojena el lunes antes de que la lluvia detuviera ese partido.

Esta es la cuarta vez que Granma y Matanzas se enfrentan en postemporada y siempre han ganado los orientales, dos en semifinales y otras dos en finales.

Con el triunfo, Carlos Martí se mantiene invictos en series de siete juegos que han llegado al límite al ganar tres, e iguala con Alfonso Urquiola, una menos que Roger Machado, de 4-4.

Hablan protagonistas:

Carlos Martí dedicó el triunfo, igual que los tres campeonatos anteriores, al Comandante en Jefe Fidel castro, artífice del movimiento deportivo cubano; a su familia, a la de los peloteros y al pueblo de Granma en general.

Estos muchachos se han crecido, igual que Matanzas tuvimos varias bajas por contratos en el extranjero, hicimos ajustes, en algunos partidos movimos jugadores de cuadro para los jardines, pero siempre hubo disposición y estuvimos buscando soluciones a los problemas que se iban presentando.

A la afición granmense le estamos eternamente agradecidos, porque nos han apoyado siempre, nunca dejaron de creer en nosotros, y por eso este resultado es de ellos también. Al equipo de Matanzas, mis respetos; ha sido un play off peleado, de principio a fin.

Leandro Martínez: Me enfoqué en sacar el primer out de cada inning, si no había ganado, eran cosas del destino, pero hoy me tocó el juego más importante del campeonato, y aquí está mi aporte, mi triunfo para que Granma volviera a ser campeón.

Osvaldo Abreu: Ha sido un gran play off, en este séptimo juego salimos muy presionados los dos equipos, pero a nosotros nos salieron mejor las cosas. Yo estuve todo el tiempo durante la postemporada tratando de entregar lo mejor de mí, batear, sacar outs, ayudar al equipo. Ahora estoy muy feliz, campeón otra vez. No jugué para ser el MVP, pero si consideran que tuve méritos para ese premio, bienvenido sea.

Armando Ferrer: Leandro Martínez nos volvió a trabajar muy bien, nosotros no pudimos batear, Arruebarrena y Mujica jugaron lesionados, hicieron lo mejor que pudieron, pero no logramos concretar aquí la ventaja que traíamos de Matanzas.

Mis felicitaciones para el equipo de Granma, para su director Carlos Martí. Ha sido un play off tenso, que llegó al séptimo juego, y ellos supieron remontar en su patio.