Yordanis Fernández buscará avanzar en el organigrama del judo masculino, aunque se enfrentará a un rival sumamente complicado. Autor: Calixto N. Llanes Publicado: 28/08/2021 | 09:40 pm
Para cuando la tinta de estas líneas esté seca sobre el papel, y las páginas reposen ya en los estanquillos, restará poco menos de una semana para que la luz naranja del pebetero deje de ser un punto visible en la geografía citadina tokiota. Tras cinco jornadas de competencia —y la sexta en desarrollo—, la delegación cubana aún no ha hecho méritos que le permitan aparecer en el medallero de los XVI Juegos Paralímpicos.
Este domingo serán dos nuestros representantes. A primera hora Noraivis De Las Heras buscará subir al podio en la final del lanzamiento del disco femenino, categoría F64. Como añadidura, la cubana busca colgarse al cuello la tercera medalla olímpica de su carrera, luego de obtener sendos terceros lugares en Atenas 2004 y Río 2016.
En esta ocasión se enfrentará a nueve competidoras de ocho países y, con 56 años, es la atleta más veterana de todas las que aparecen en la lista de esta final. Esta longevidad, quizá, pueda aportarle algo de ventaja desde el punto de vista sicológico. Pocas de sus oponentes tienen el recorrido que exhibe la cubana, a este nivel. No obstante, la edad también puede hacer mella en su desempeño, por razones lógicas.
En la prueba sale como favorita la china Yao Juen, multicampeona en citas estivales, y actual titular en el lanzamiento del disco. Menos en la edición ateniense, la asiática se ha colgado el oro en todos los Juegos Paralímpicos desde el 2000. Además del disco, Juen ha dominado en el lanzamiento de la jabalina e impulsión de la bala. Su palmarés ha ganado también muchísimo peso gracias a nueve medallas en Copas del Mundo, siete de ellas de oro.
Los ojos se posarán, además, sobre la jovencita polaca Faustyna Kotłowska, bronce en el Mundial de Dubai en el 2019, así como la australiana Sarah Edmiston, bronce del orbe en Londres 2017 y subtitular en 2019.
Un rato más tarde, en los octavos de final de los +100 kg en el judo masculino, Yordanis Fernández tratará de adueñarse del tatami, en detrimento del brasileño Willians Araújo.
El rival de turno del cubano será a todas luces un hueso duro de roer. Hace cinco años, Araújo fue subcampeón en su tierra, aunque durante el último ciclo olímpico ha sido sometido a varias operaciones que han mermado de manera ostensible su desempeño y, por ende, sus resultados.
El matancero Fernández —que, como dato curioso, inició su carrera deportiva en el béisbol— tampoco es neófito en esto de «trepar al podio». El Campeonato Mundial de Colorado, en 2014, obtuvo el tercer lugar, medalla que repitió dos años más tarde, esta vez bajo los cinco aros en Río de Janeiro. En los Parapanamericanos de Toronto y Lima, eso sí, no hubo contrincante que le hiciera fuerza en su camino al oro. Con esto dicho, el combate tiene, a priori, todas las papeletas para ser de altos kilates.
Recordemos que hace cinco años, en los escenarios deportivos de Río 2016, la delegación cubana —mucho más numerosa, cabe destacar— logró cerrar su actuación entre los 20 mejores países del medallero, al ubicarse en el escaño 18 gracias a una cosecha de ocho títulos, un subtítulo y seis preseas bronceadas, para un total de 15 metales.