Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Las expectativas del atletismo

Una de las delegaciones cubanas más reducidas de las últimas ediciones olímpicas irá a representar al atletismo cubano en Tokio

Autor:

Enio Echezábal Acosta

El próximo verano asistirá a los Juegos Olímpicos de la capital japonesa una de las delegaciones cubanas más reducidas de las últimas ediciones, una que aún lo tiene difícil para llegar al centenar de atletas con boleto para el evento más importante del cuatrienio.

Dentro del grupo que ya tiene su pasaje seguro rumbo a Tokio, están los representantes del atletismo, quienes, a pesar de las difíciles condiciones que se han dado a lo largo de este año y medio de pandemia, poco a poco comienzan a despertar ciertas expectativas entre aficionados y especialistas de cara a la cita múltiple.

Para empezar, toca hablar de las discóbolas: Yaimé Pérez y Denia Caballero, un par que, junto a la croata Sandra Perkovic, ahora mismo parece las posibilidades mayores de de ganarse su lugar en el podio de esa modalidad. Consideradas por todos como las rivales a derrotar, disco en mano y por ahí algunos comienzan a pensar en grande, tanto como en un nuevo título de esa disciplina, luego del obtenido por Maritza Martén en Barcelona 1992. 

Después de ellas, es justo mencionar a Juan Miguel Echevarría, monarca mundial bajo techo de 2018 y bronce al aire libre al año siguiente, quien es considerado igualmente como uno de los pesos pesados del salto largo en este momento. Rivales duros tendrá, sobre todo el actual rey el orbe, el jamaicano Tajay Gayle, los sudafricanos Luvo Manyonga y Ruswahl Samaai, así como el griego Miltiadis Tengoglou, y, cómo no, sus compatriotas Maykel Massó y Lester Lescay. No obstante, habrá que contar con él a la hora de la verdad.

Aunque tal vez no podemos considerarlas como aspirantes potenciales al título, las integrantes del relevo 4x400 femenino, recientemente coronadas como reinas absolutas en la lid planetaria de la categoría, sí que tendrán la oportunidad de luchar por una presea que sería histórica. El conjunto de la Mayor de las Antillas, integrado por Rose Mary Almanza, Zuriam Hechavarría, Lisneydi Veitía, Sahily Diago y Roxana Gómez puede no ser tan mediático como sus pares de Estados Unidos o de Jamaica, pero así todo, estas cuartetas deberán cuidarse y no subestimar a la nuestra.

Otra grande a la que jamás debemos obviar es la pertiguista Yarisley Silva, quien a pesar de los enormes obstáculos que ha debido salvar fuera de la pista, continúa siendo una deportista de élite en todos los sentidos posibles. Sus colegas, Sidorova, Stefanidi, Newman, Morris, Peinado o Bradshaw le pondrán el listón alto (nunca mejor dicho), pero hay seguridad de que ella probará una vez más su calidad.

Cierran el grupo los triplistas Liadagmis Povea, Davisleydis Velazco, Cristian Nápoles, Andy Díaz y Jordan Díaz, así como el saltador de altura Luis Enrique Zayas. De todos ellos, destaca Povea como quien mayores chances presenta para colgarse una presea, algo que resultaría en alegría mayúscula. A dos meses del gran momento, cierto es que hay margen para las sorpresas, pero será solo bajo el cielo tokiota que se despejarán esas variables.

 

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