Palma, un coloso del box en Cuba. Autor: Juan Moreno Publicado: 21/09/2017 | 06:55 pm
Cuando estaba a punto de salir a la luz pública la segunda edición de Casos y cosas de la pelota, una nota en el periódico Juventud Rebelde decía que este texto, con el paso del tiempo y el apoyo de las editoriales, podría convertirse en una suerte de libro Guinness de las curiosidades de la pelota criolla y lo catalogó como un libro sin final.
Tres años después me atrevo a empuñar nuevamente el madero en este extrainning interminable que es nuestro béisbol, para poner otra vez en manos de los lectores el resultado de la ardua y paciente labor de coleccionar hechos inéditos, coincidencias y rarezas de la pelota cubana que comencé cuando tenía siete años de edad.
En esta tercera edición, próxima a salir, la cifra de sucesos ha crecido a 404, es decir, 102 casos nuevos con relación al anterior volumen, además de la actualización de otros publicados en las dos primeras versiones.
Aquí muchos amantes de nuestro principal pasatiempo se enterarán de la insólita barrida que les dieron los Cachorros de Holguín a los Gallos de Sancti Spíritus en el estadio Calixto García, el viernes 6 de diciembre del 2013, o que hubo un día en que los nombres de todos los serpentineros ganadores de la jornada comenzaban con la letra Y.
Sabrán quién ha sido el pelotero más longevo de cuantos han pasado por nuestros campeonatos nacionales y que los tres jugadores nacidos en Sancti Spíritus que completaron los dos millares de hits lo hicieron vistiendo el uniforme de otros equipos.
Espero que disfruten estos hechos sobre algo que forma parte de la identidad del cubano como es el deporte de las bolas y los strikes.
Predilección por el 27
Nunca se lo pregunté. Mas, no hay dudas de que el jonronero matancero Lázaro Junco sentía predilección por el 27 cuando se trataba de conectar vuelacercas marcados, pues un 27 de marzo de 1984, le desapareció la pelota en el estadio Victoria de Girón al capitalino Lázaro de la Torre, para redondear el centenar de batazos de cuatro esquinas en series nacionales. El 27 de abril de 1991 completó los 300 bambinazos contra un lanzamiento de José Ibar, en el mismo parque. Y el 27 de enero de 1996, igualmente en el Victoria de Girón, abrió el club de los 400 cuadrangulares en nuestros torneos beisboleros, al golpear con fuerza un envío de Alberto Pavón, de la Isla de la Juventud.
Junco, uno de los máximos jonroneros de la pelota cubana. Foto: Juan Moreno
Todas las decisiones contra el mismo equipo
El zurdo Adiel Palma, con la franela de Centrales, tuvo balance de dos victorias y cuatro derrotas en la Selectiva de 1994. Llama la atención que todas las decisiones fueron contra el equipo Habana. Sus dos sonrisas las logró curiosamente el mismo día: sábado 30 de abril de 1994, con marcadores de 9 a 7 y 6 a 4, mientras perdía con pizarra de 2 a 10, 4 a 7, 3 a 6 y 4 a 7.
Arribaron a los 200 ponches el 2 de abril
Al dejar a 11 industrialistas con el madero al hombro, el 2 de abril de 1968, en un desafío correspondiente a la VII Serie Nacional, Manuel Alarcón, se convirtió en el primer serpentinero en retirar a 200 bateadores por la vía de los strikes en una temporada en el período revolucionario. Resulta curioso que un año exacto después, el 2 de abril de 1969, el zurdo Santiago Changa Mederos, con la franela del conjunto Habana, le rompió la primacía al Cobrero, al propinarle seis ponches al combativo equipo Azucareros, para así llegar a 201 estrucados, récord que finalmente extendió a 208, al dominar por esa amarga vía a cuatro pinareños y tres integrantes de Henequeneros en sus dos posteriores salidas al box. Tanto uno como el otro archivaron 36 ponches en el mes de diciembre de sus respectivas contiendas. La marca de Changa permaneció imbatible durante 31 años, hasta que en el campeonato de 2000-2001, Maels Rodríguez, el veloz derecho de Cacique que lanzaba para los espirituanos, la elevó a 263, una cifra que parece intocable por largo tiempo.
Ni hits ni carreras en su primera lechada
Tal vez a muchos aficionados les cueste trabajo creerlo, pero el estelar derecho de Sierra Morena, Freddy Asiel Álvarez Sáez, tuvo que esperar hasta su novena temporada para poder registrar una lechada completa en series nacionales. ¡Y qué blanqueada!: un juego de cero jits cero carreras frente a los Gallos de Sancti Spíritus, el 9 de noviembre del 2013, en el estadio Sandino. Previo a esa soberbia demostración Freddy había lanzado en 158 partidos en nuestros campeonatos nacionales, de los cuales abrió en 148 y solo había caminado completa la ruta en 12 juegos, con 17 participaciones en lechadas.
Victoria se escribe con... Y
Curiosa la jornada beisbolera del domingo 2 marzo de 2008, correspondiente a la XLVII Serie Nacional de Béisbol, en la que en los ocho partidos que tuvieron conclusión ese día, todos los nombres de los lanzadores ganadores comenzaban con la letra «Y». Así, por ejemplo, el pinareño Yunieski Maya se apuntó el éxito sobre provincia Habana, 5 carreras a 4; los villaclareños Yolexis Ulacia y Yoandri Ruiz derrotaron en un doble juego a Granma, con marcadores de 8 a 5 y 4 a 3, respectivamente.
Por su parte, Ciego de Ávila superó a Holguín, 2 a 1, con crédito victorioso a la cuenta de Yander Guevara; el guantanamero Yandri Lestapier dominó a Camagüey, 7 a 3; Yadiel Torres guio a Industriales al triunfo, 7 a 2, sobre la Isla de la Juventud en el Cristóbal Labra; el tunero Yoendri Molina superó a Santiago de Cuba, 17 a 8, con lo cual quebró la cadena de 20 partidos ganados en línea recta tejida por Alberto Bicet. Finalmente, Yovani Aragón se anotó la rayita positiva en un choque en que los Gallos de Sancti Spíritus salieron airosos, 17 a 8, contra Matanzas, en el único desafío perdido por un monticulista con «Y», el zurdo Yosvani Fonseca.
Decía que esto se refiere a los desenlaces de todos los partidos que tuvieron decisión en esa tarde dominical, porque hubo uno entre Metropolitanos y Cienfuegos que fue sellado por oscuridad cuando ya habían transcurrido 13 entradas. Aquí se iba a producir la excepción de la regla porque al reanudarse posteriormente, Darwin Rafael Beltrán, de Metropolitanos, escapó de la maldición, tras salir exitoso, 11 a 7, a costa de Cienfuegos, que empleó al estelar zurdo Adiel Palma.
Recordistas en triples
En la VIII Serie Nacional, 1968-1969, Wilfredo Sánchez, con el equipo Henequeneros estableció récord de triples para un campeonato nacional con trece conexiones de ese tipo. En ese mismo campeonato, su hermano Armando, quien debutaba con el uniforme de Matanzas, implantó primacía para un novato con doce batazos de tres esquinas. Ambas marcas se mantenían intactas cuando ya los campeonatos nacionales van por 56 versiones.
Jonrón 94 en el mismo choque
El capitalino Yoandry Urgellés Cobas, vistiendo el uniforme de Artemisa, y el santiaguero Pedro Poll Martínez comenzaron la 55 Serie Nacional con 92 estacazos de vuelta completa en sus expedientes beisboleros. Por coincidencia el 25 de septiembre de 2015, durante un enfrentamiento entre sus respectivos equipos en el artemiseño estadio 26 de Julio, largaron sus segundos jonrones de la contienda para llegar cada uno a 94 películas de cuatro esquinas.
Urgellés le desapareció la pelota a Alberto Bicet. Minutos más tarde, Poll le hizo lo mismo a Lázaro Pedro Suárez. Para mayor coincidencia los dos alinearon en el tercer turno en sus conjuntos.
Años atrás, el martes 20 de febrero de 1996, en el tercer choque entre Industriales y Villa Clara, en el play off final por el título de la XXXV Serie Nacional, dos jugadores de los azules, Lázaro Vargas y Roberto Colina, también arribaron a los 94 cuadrangulares en el mismo encuentro, ambos ligaron sus conexiones frente al serpentinero anaranjado Jesús Manso, en el octavo capítulo, sin corredores a bordo.
Poll fue muy oportuno con el madero. Foto: Juan Moreno