Dayaris entonó la nota más alta en la jornada de apertura. Autor: Juan Moreno Publicado: 21/09/2017 | 06:25 pm
A pesar del sorteo enrevesado que le deparó a la monarca panamericana Dayaris Mestre (-48 kilogramos), la espirituana se encargó de evitar la blanqueada antillana en la primera fecha del Grand Prix de Judo de La Habana y se impuso por uno de los terceros lugares ante la francesa Laetitia Payet, triple bronceada europea, en un combate culminado por shido (penalización).
Antes de eso, Mestre burló la revancha ante la argentina Paula Pareto, campeona mundial de Astaná 2015 y a la postre bronceada, y la volvió a vencer, esta vez por shido en Regla de Oro. Pero en semifinales cayó ante la campeona olímpica de Londres 2012 y en definitiva titular, la brasileña Sarah Menezes, por descalificación.
«Me sentí en muy buena forma a pesar de que el organigrama se veía dificil. La revancha con Pareto me motivó y se impuso al final mi preparación, aunque luego perdí por hansoku-make ante Menezes, un combate que yo ganaba», dijo Dayaris en las gradas, un tanto inconforme con su resultado.
Gretel Romero (-52), se acuñó una ubicación destacada en la justa, al quedar en la quinta posición tras ceder por bronce ante la italiana Odette Giufrida. En esa división el oro fue para la alemana Mareen Kraeh, tercera del mundo en Río de Janeiro 2013, victimaria de la belga Ilse Heylen.
Nuestra principal figura en los 57 kg, la santiaguera Aliuska Ojeda, no pasó de los octavos de final, pues cedió por ippon frente a la canadiense Catheriene Beauchemin. Esa categoría vio erigirse monarca a la estadounidense Marti Malloy, bronce en la cita estival de Londres, quien superó a la húngara Hedvig Karakas. El resultado inesperado tuvo el nombre de Rafaela Silva, as universal que esta vez culminó tercera.
Por su parte, los principales judocas cubanos se gastaron una primera fecha desfavorable, si se tiene en cuenta que en las dos divisiones disputadas ninguno rebasó los octavos de final. A causa de la muerte de su hermano, Yandri Torres no compitió en la de -60, en la que se coronó el brasileño Eric Takabatake y fue segundo el turco Bekir Ozlu.
En el peso inmediato superior (-66), el ruso Kamal Khan-Magomedov (tercer escaño en la justa mundial de Chelyabinsk 2014) salió airoso en sus cuatro pleitos, el último válido para llevarse el metal dorado frente al francés Loic Korval.
Grosso modo, la jornada inaugural contribuyó a ratificar un pronóstico precompetencia. Brasil es uno de los claros aspirantes a adueñarse de la proa colectiva, pues registra balance de dos títulos y un tercer sitio, seguido por Alemania, Rusia y Estados Unidos, con un vellocino.
Hoy los hombres pugnarán en -73 y -81, en tanto las féminas lo harán en -63 y -70.