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Todavía no pasa la resaca de mi embriaguez más sabrosa, me refiero al goce que supuso la XXX Olimpiada, y cuando pensaba reposar un rato y aliviar así este dolor de cabeza después de tanta algarabía y brinca-brinca, recordé que la fiesta del músculo a lo largo y ancho de nuestro globo terráqueo, lejos de finalizar e ir al descanso, continúa.
Confieso que me imaginé haciendo malabares para encontrar noticias en estos días de inactividad deportiva, pues si bien ando cazando a varios de nuestros campeones y finalistas con el objetivo de entrevistarlos y completar una serie de artículos, sus merecidas vacaciones tras agotadoras faenas me impiden obrar con la rapidez requerida.
Entonces, a la espera de la confirmación de algunos y la benevolencia de otros, les comento que la IAAF no se ha dormido en los laureles y mañana mismo arrancará su actividad con la décima parada de la Liga de Diamante, programada en Estocolmo, Suecia, y en donde Cuba tendrá a dos representantes.
Se trata de Yarisley Silva, subtitular olímpica en salto con pértiga, y la discóbola Yarelis Barrios, cuarta en la gran final londinense.
Garrocha en mano, nuestra representante no irá precisamente a un picnic, pues tendrá enfrente a la actual reina bajo los cinco aros, la estadounidense Jennifer Suhr, y a otras cuatro que también pugnaron por las preseas: las alemanas Silke Spiegelburg (cuarta) y Martina Strutz (quinta), así como la británica Holly Bleasdale (sexta) y la checa Jirina Ptacnikova (séptima). De las «bestias» más hermosas en esta especialidad solo faltará la rusa Yelena Isinbayeva, líder histórica a pesar de haber perdido el trono.
Además, nuestra ilustre pinareña verá nuevamente a la vigente campeona mundial, la brasileña Fabiana Murer, quien debe estar pidiendo a gritos mejor suerte, pues desde noviembre de 2011 hasta la fecha cada vez que compite con Silva sale derrotada. La carioca lidera el ranking de la justa diamantina, merced a ocho unidades.
Recuerden que esta competición consta de 14 fases repartidas entre ciudades diferentes, pero cada disciplina ve hostilidades en siete ocasiones. El ganador de cada urbe acumula cuatro puntos y sus escoltas más cercanos dos y uno, por ese orden. La última parada es obligatoria para quienes pretendan ceñirse la corona, y allí se consigue el doble del acumulado.
En la presente justa con nombre de gema, Barrios tratará de luchar un puesto entre las punteras, aunque a decir verdad no creo que pueda reeditar su título de las dos ediciones precedentes (sí, ella ha ganado siempre) debido a sus dos rayas, bien distantes de las 18 de la croata Sandra Perkovic, «coincidentemente» reina bajo los cinco aros de la Gran Bretaña. Todavía recuerdo su envío ganador (69,11 metros) y me erizo.
Entre las principales atracciones del viernes destaca el triple salto, en el que lucharán el campeón y subcampeón olímpico (Christian Taylor y Will Claye, respectivamente).
