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La reincorporación del central Osmany Camejo será vital para un buen comienzo en el torneo. Autor: Calixto N. Llanes Publicado: 21/09/2017 | 05:09 pm
Horas antes del debut cubano en la XXII edición de la Liga Mundial de voleibol, sus acompañantes en el grupo D del torneo rompieron las hostilidades en la ciudad francesa de Lyon.
Allí los anfitriones no pudieron con el empuje de los italianos, quienes se impusieron en tres parciales con marcadores hasta cierto modo sorprendentes.
Según el reporte difundido por el sitio web de la Federación Internacional de Voleibol (FIVB), los italianos comenzaron impetuosos, apoyados en su potente servicio y efectivo bloqueo, para imponerse en la primera manga por fácil 25-14.
En el segundo parcial los anfitriones opusieron una mayor resistencia, pero también cedieron con tanteador 20-25. El tercer set fue casi una copia del primero y sentenció el triunfo de los visitantes con un aplastante 25-12.
Mientras, en la llave B el elenco de Rusia comenzó con buen pie barriendo como anfitrión a la representación de Japón. Los vigentes submonarcas del torneo abrieron con un exitoso 25-22, y luego «cerraron la pinza» imponiéndose en los restantes sets por 25-20 y 25-18.
Otra buena arrancada tuvieron los polacos, quienes aprovecharon la condición de locales para imponerse por 3-0 (25-20, 25-22 y 25-19) a Estados Unidos en la agrupación A.
Poco después del cierre de esta edición, la renovada escuadra cubana protagonizaba su estreno en el certamen en la ciudad sudcoreana de Suwon, donde los anfitriones esperaban conseguir su primera victoria en duelos particulares.
Ambos equipos cerrarán su primer match en la madrugada de este domingo en nuestro país, y luego los discípulos de Orlando Samuels se trasladarán a Francia para cumplir con su segunda serie.
