Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

El bloqueo brasileño no pudo detener los ataques de William Priddy. Foto: AP Las victorias de Estados Unidos ante Brasil y Serbia frente a Rusia, les posibilitaron discutir hoy el título de la XIX edición de la Liga Mundial de Voleibol, en el Gimnasio Maracanazinho, de Río de Janeiro.

Abrumados salieron este sábado los aficionados brasileños que colmaron la bella instalación, ante la derrota de su escuadra por la vía del 3-0 (23-25, 22-25 y 25-27) en el choque semifinal ante Estados Unidos, y que ahora los limita a la discusión de la tercera plaza con los rusos.

Mas, «una cosa es con guitarra y otra con violín», y no se deben confundir estos resultados con lo que pueda ocurrir en el voleibol olímpico de Beijing. Esos partidos fueron solo un avance de la película y entre los equipos grandes cualquiera gana o pierde un desafío, o una medalla.

Brasil no fue un desastre. Simplemente, el colectivo estadounidense jugó con nota de sobresaliente en todos los aspectos, para cortar la racha de cinco galardones consecutivos conquistados en estos certámenes por los discípulos de Bernardo Rezende.

Clayton Stanley (16), William Priddy (12) y Riley Salmon (11) con los certeros pases del veterano de mil campañas Lloy Ball, llevaron la voz cantante en la ofensiva vencedora, en tanto Dante Amaral (17) y el veterano Giba (14) lo hicieron por los derrotados.

Mientras, el conjunto de Serbia exhibió su «guapería» en el terreno. Lo demostró frente a Francia en la serie final de la fase anterior y ahora lo acaba de ratificar con blanqueada sobre Rusia, por parciales de 25-19, 25-19 y 25-23, bajo la batuta de su siempre efectivo capitán Iván Miljkovic.

Así, los balcánicos avanzaron a la discusión del oro ante Estados Unidos. Cualquiera de los dos conjuntos que venza, será campeón de la Liga por primera vez en su historia. Los serbios llegaron en dos ocasiones a la medalla de plata y los norteños al bronce.

En el triunfo de ayer, Iván «el Terrible» anotó 22 tantos y Bojan Janic 12, mientras que en las filas perdedoras solo Semen Poltavskyi llegó a los dos dígitos (13), a pesar de que jugó en los dos últimos sets.