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Dayron Robles fue plata en Grosseto y ahora brilla entre los mayores. Foto: Calixto N. Llanes Solo una medalla de plata por intermedio del decatlonista Yordanis García fue el magro saldo de la reducida comitiva cubana que acudió al XI Campeonato Mundial de Atletismo para juveniles disputado en Beijing, China.
Cierto es que cuatro de nuestros cinco concursantes llegaron a finales, pero también es verdad que en casa quedaron otros que tenían suficiente fuerza alcanzar buenos dividendos.
Más de 40 jóvenes valores cubanos lograron realizar las marcas mínimas exigidas por la IAAF para poder asistir a Beijing. Era lógico que no todos fueran, pero…
Soy del criterio que últimamente no se le ha prestado al atletismo juvenil la atención que requiere, y se corre el riesgo de perder a buena parte del relevo de las principales figuras del momento.
Cuando escribo esto me baso en que Cuba, por ejemplo, envió a 25 atletas al Mundial de esta categoría de 1992 en Seúl —ciudad tan lejana como Beijing— para cosechar dos medallas de oro, cuatro de plata y una de bronce, así como sumar otros nueve finalistas. Ese resultado nos colocó en la octava posición por países y sextos por el sistema de puntuación.
Recordemos que en aquel entonces ya atravesábamos difíciles condiciones económicas, y no obstante, los juveniles alcanzaron resultados superiores a los actuales en los sucesivos Mundiales organizados con intervalos de dos años en Lisboa, Sydney, Francia, Chile y Kingston.
El peligroso declive comenzó hace dos años en Grosseto, Italia, donde apenas compitieron cuatro cubanos, entre ellos el vallista Dayron Robles, cuya medalla de plata fue la única presea conquistada por esa delegación.
Previo a la contienda en Beijing, el senegalés Lamine Diack, máximo directivo del atletismo, reconoció el aporte de Cuba a las citas universales para juveniles, y citó como ejemplo a la jabalinista Osleidys Menéndez, monarca y recordista olímpica y mundial, vencedora también en torneos de este tipo.
Si agregáramos a otros la lista sería un poco extensa, porque el palmarés histórico de Cuba en estas lides se eleva a 16 medallas de oro, 22 de plata y 13 de bronce.
Pero hay más. La ausencia del atletismo cubano se ha extendido a los dos últimos campeonatos centroamericanos y del Caribe para las edades de sub-17 (cadetes) y sub-20 (juveniles) disputados en México durante el 2004 y en Trinidad y Tobago hace pocos meses.
Todos queremos un futuro mejor, por eso la realidad de hoy invita a meditar cómo lograrlo.
