Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Fuga con guarnicíon

Ambigüedades de las palabras, parece que le ayudaron por igual guardias de la prisión y los tomates y papas con que se adereza un plato. Raúl Dinamarca Berríos, un convicto chileno, ayudante de cocina en la cárcel, logró fugarse, después de haber dado de comer al resto de los reclusos. Aprovechando el momento en que le entregaban los sacos de verduras con los que prepararía la comida de la próxima jornada, se introdujo en un doble fondo del vehículo y a bolina. Pero más que fallos en los controles de seguridad se presume que «la colaboración de personal del recinto» le facilitó la huida, así que entre la guarnición y por la guarnición, abur...

A Germán Barajas Álvarez poco le valieron sus cinco años de experiencia. Estando de servicio y con su uniforme de policía fue asaltado a mano armada, al mediodía y en pleno centro de Aguascalientes, cuando apenas había sacado del banco su dinerito para las celebraciones de fin de año. El relato tuvo la precisión oficial: «Eran una señora robusta morena como de 1,60 metros y otro sujeto más alto que sacó una pistola negra de calibre .9 y me la colocó en la costilla derecha y me dijo: “Camínale o te mueres”. Luego me metieron a una tienda de ropa en donde había mucha gente y la señora me metió la mano en la bolsa derecha del pantalón y sacó mi dinero. Entonces el hombre me sujetó las manos por detrás, me arrojó al piso y se echaron a correr. Me levanté y pedí auxilio por radio (de la patrulla), pero no los agarraron». ¿Y cómo? Si él era el policía de servicio.

Respetar el dolor de los parientes, el recibimiento de las condolencias y los varios ritos para despedir a un difunto será multado en Venecia. Esta vez el dicho de «respeten a los muertos» se invirtió, pues la alcaldía de la famosa ciudad sobre las aguas considera que cuando las funerarias prolongan los horarios de los entierros, obliga al ayuntamiento a pagar horas extras a los enterradores. Ahora les llaman «funerales fast-food» (comida rápida).