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A diferencia de como se llevaba adelante hasta ahora, el curso escolar ha tenido que adecuarse a las condiciones impuestas por la pandemia. Autor: Archivo de JR Publicado: 04/11/2020 | 10:05 pm
Cuando el 23 de marzo se informó a través de los medios oficiales de comunicación la suspensión temporal del curso escolar 2019-2020 debido al impacto de la COVID-19, la bicentenaria Academia Nacional de Bellas Artes San Alejandro cerró sus puertas al igual que el resto de las escuelas cubanas, y se sumó a la tarea de darle continuidad a la enseñanza de manera no presencial.
«La creación de grupos de WhatsApp por años de estudios y/o especialidades, mediante los cuales los alumnos intercambiaron de manera virtual desde sus casas con el claustro, y el uso de las redes sociales en plataformas como Facebook e Instagram, jugaron un papel trascendental. Los maestros colocaron links de bibliografías, y guías de estudios, entre otros documentos, que a los estudiantes les resultaran útiles», comenta Lesmes Larroza, director de la institución.
Lesmes Larroza, director de la Academia de Bellas Artes San Alejandro. Foto: Ricardo Tamayo
«La alternativa contribuyó a una mayor independencia frente al estudio y los procesos de investigación por parte de los educandos; algo que es esencial para los estudiantes de arte, quienes deben constantemente buscar antecedentes y contrastar fuentes, para la comprensión de la sociedad y la búsqueda permanente de la verdad y lo bello, vital en la construcción de un criterio humanístico sólido, frente a la amplia y versátil amalgama de informaciones publicadas en la web».
Un hecho transcendental, dijo, fue el desarrollo de actividades docentes televisivas con temas específicos de las especialidades de la amplia variedad de manifestaciones artísticas existentes en nuestro sistema de enseñanza artística. El canal Tele Rebelde, de conjunto con el Centro Nacional de Escuelas de Arte (CNEART), la Universidad de las Artes ISA y las Escuelas Nacionales de Arte (Circo, Ballet, Música, Teatro, Danza y Artes Visuales San Alejandro), concibieron una parrilla televisiva para la enseñanza artística del país. En nuestro caso diseñamos actividades docentes de pintura, dibujo, escultura y cultura cubana.
«Contemplamos no solo al nivel medio profesional de los cursos diurno y nocturno para trabajadores, sino también al nuevo nivel elemental que se forma con carácter experimental hoy en las aulas de San Alejandro e, incluso, a los niños de nuestros talleres vocacionales que toman clases preparatorias para su presentación a venideras captaciones».
―¿Cómo se ha preparado San Alejandro para el reinicio del curso escolar?
―Las primeras cuatro semanas serán para sistematizar y cerrar las asignaturas y evaluaciones pendientes. Para el nuevo curso 2020-2021 ha sido necesario un reajuste de los contenidos de cada asignatura y su sistema de evaluación, atendiendo a la continuidad de los contenidos y objetivos a vencer por años de estudios. Se crearon grupos de trabajo metodológicos desde el CNEART de conjunto con sus escuelas provinciales y centros regionales para trazar una estrategia por especialidades para el país.
«Las condiciones higiénico-sanitarias constituyen una prioridad. San Alejandro fue certificada sanitariamente el pasado 3 de julio por la Dirección Municipal de Salud, y actualmente se cumple con las medidas establecidas. Nos mantenemos atentos a las orientaciones de la máxima dirección del país, el Ministerio de Cultura y el Centro Nacional de Escuelas de Arte.
«San Alejandro y las otras seis academias de artes visuales que existen en el país cuentan con los recursos materiales necesarios para llevar adelante el curso escolar».
―¿De qué manera lograrán el aislamiento físico?
―Atendiendo al Plan de Medidas de Etapa pos-COVID-19, desarrollado por la dirección de la Academia San Alejandro, basado en los requerimientos higiénico-sanitarios trazados por el Ministerio de Salud Pública. En el caso del distanciamiento se ha diseñado un horario docente escalonado que responde a la división de grupos a partir de las características físicas de los locales existentes y matrícula, respetando la especificidad de cada Taller de Especialidad. Por eso
hemos habilitado como aulas incluso los espacios de las galerías y otras áreas del centro.
«También se han concebido horarios escalonados para la merienda y el almuerzo en el comedor escolar, donde se han separado mesas y sillas. Es una forma más de proteger la salud de nuestros educandos, trabajadores y claustro, y de mantener el rigor del proceso docente educativo. La institución se ha asegurado de hipoclorito, agua potable, jabón, pasos podálicos a las entradas de las áreas comunes, etc.».
―¿Qué pasará con las pruebas de ingreso tanto al nivel elemental como el medio?
―Los exámenes de captación al nivel medio (curso diurno) se desarrollaron entre los meses de enero y febrero de este año. El 20 de marzo ―antes de la suspensión temporal del curso por la COVID-19― fueron publicados los resultados de los aspirantes seleccionados, los cuales iniciarán sus estudios al concluir las cuatro semanas iniciales, a partir de noviembre, dedicadas a la sistematización de contenidos y cierre de evaluaciones.
«En el caso del nuevo Curso de Trabajadores de nivel medio reabierto este 2020, los estudiantes seleccionados iniciaron sus estudios excepcionalmente el 2 de marzo y el 23 se suspendió por la COVID-19, menos de un mes de clases fue lo que recibieron por lo que la propuesta es no hacer este año una nueva captación, sino que este mismo grupo continúe a partir de este noviembre su curso escolar.
«Para nivel elemental mantenemos la captación de este año, con un nuevo cronograma ajustado a la actual situación. En la semana del 19 al 30 de octubre se divulgó la convocatoria. Las inscripciones se organizaron del 2 al 5 noviembre; los exámenes, los días 6 y 7, mientras que la calificación y otorgamiento de plazas se realizarán del 9 al 13 de este mes. Posteriormente se atenderá a los padres de aspirantes no seleccionados.
«Los requisitos para presentarse eran los siguientes: estar cursando el 6to. grado en una escuela de la capital, poseer dirección permanente en La Habana avalada por su tarjeta de menor, y presentar un documento firmado por el secretario docente y director de la escuela primaria certificando sus estudios en dicho centro.
«El nivel elemental es un proyecto con carácter experimental que desde el curso 2019-2020 lleva a cabo la Academia Nacional de Bellas Artes San Alejandro, y que en este primer momento solo existe en la capital. Tiene su origen en la historia de San Alejandro, decana de las artes plásticas en Cuba, en su Escuela Elemental de Artes Plásticas y Aplicadas anexa a San Alejandro, que vio la luz el 4 de septiembre de 1934, hace 85 años. Según los resultados y evaluación puntual se decidirá o no si extenderlo a otros territorios del país».
―¿Reducirá San Alejandro su matrícula de ingreso al próximo curso escolar?
―No se hará en ninguno de sus modelos formativos (nivel elemental, nivel medio diurno y nivel medio nocturno). La ma-
trícula se mantiene de acuerdo al Programa de Desarrollo Cultural para la formación, previsto de conjunto con el Consejo Nacional de las Artes Plásticas y el Centro Nacional de Escuelas de Arte, para el período 2019-2024.
«A La Habana le corresponden 25 plazas para el nivel medio diurno, 15 para el nivel medio nocturno e igual número para el elemental. En el caso de nivel medio, Pinar del Río cuenta con cinco al igual que la Isla de la Juventud; Artemisa y Mayabeque con diez cada una. Todo ello para una matrícula total de 85 estudiantes del occidente que deberá formarse en nuestras aulas».
