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La incorporación a las piezas de herraduras de caballos, con el propósito de simular las escamas, permitió darles una visión más natural y flexible. Autor: Roberto Ruiz Espinosa Publicado: 21/09/2017 | 05:47 pm
El sonido de las pulidoras y el olor a metal recién cortado y a soldadura caliente invade aún el taller del escultor Frank David Pérez Alfonso, ubicado en el antiguo cine Lux, del capitalino municipio de Playa.
Tres golfis (conocidos como peces de oro) suspendidos en el aire, con tensores, acaban de nacer de las manos de este creador, el mismo que nos sorprendiera durante la pasada Bienal de La Habana con un Harry Potter, en hierro, que todavía perdura en la memoria colectiva.
Casi un año tomó al artista y a su equipo de trabajo la realización de estas esculturas, a una escala de cinco metros de largo, por 2,50 de alto y uno de ancho. Impresionante resulta la incorporación a ellas de herraduras de caballos, con el propósito de simular las escamas y darles una visión más natural y flexible. Ayudan en la composición barras lisas, de cabilla de una pulgada y chapas de metal.
La adecuada iluminación que acompaña este conjunto de piezas y el ambiente concebido a su alrededor remiten a un entorno marino. «Ha sido un trabajo apasionante, pero duro. El hierro es un material que ofrece infinitas posibilidades, pero hay que saber moldearlo y aprovechar sus bondades», expresó Frank David Pérez Alfonso.
«Pensar en cómo ubicar las herraduras para que simularan las escamas, abriendo unas y cerrando otras, de manera que permitieran el movimiento, me quitó el sueño. Desde entonces no he logrado librarme del insomnio», destacó.
En declaraciones a JR, Frank David dijo que con estas obras ha querido transmitir un conjunto de ideas respecto a la sociedad actual.
«En Tiempos de Harry Potter, el conocido niño mago sirvió de pretexto para dialogar sobre diversas problemáticas sociales que me inspiran a diario; ahora hemos seguido una línea parecida (no en los materiales y sí en los mensajes que nos interesa comunicar), pero con los peces.
«Elegimos a este crustáceo por su capacidad de resistencia, a pesar de la contaminación ambiental», comentó el artista.
Con un lenguaje directo y eminentemente figurativo, Como los peces, título de la actual propuesta —que se distingue por su realismo y esmerado acabado—, será inaugurada mañana viernes, a las 7:30 p.m., en el antiguo cine Lux, durante la presentación del proyecto cultural Arte Lux, el cual integra armónicamente la plástica con el teatro, y está volcado hacia la comunidad y la población en general.
Esa misma noche, pero en el área del patio, el grupo de teatro Aire Frío, en colaboración con la Universidad de las Artes (Isa), estrenará la obra Escuadra hacia la muerte, de Alfonso Sastre, bajo la dirección de Eduardo Eimil.
De formación autodidacta, Pérez Alfonso ha realizado, entre otras esculturas, al Polo Montañez que está en la casa de Las Terrazas, Pinar del Río, donde vivió el conocido cantante. Es autor, además, de la obra Cinco, dedicada a nuestros héroes antiterroristas condenados injustamente en Estados Unidos.
Llevan su firma más de una decena de creaciones emplazadas en diferentes lugares de la Isla, como el Pabellón Cuba, la Residencia de Ballet, el hotel Paradiso, la Escuela Interarmas Camilo Cienfuegos, de Arroyo Arenas; Residencial Tarará...
Recientemente, participó en la restauración de la parte escultórica de la fachada del teatro Martí, y en La cochera de Oquendo, en Carlos III. Desde 2009 trabaja de conjunto con Rogelio Miralles, quien se graduó ese mismo año en la Academia de Artes Plásticas Eduardo Abela.
