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En opinión de la prestigiosa intelectual Ana Cairo muchas aristas de la vida y obra de Nicolás Guillén están aún por estudiarse. Autor: Leyanis Infante Curbelo Publicado: 21/09/2017 | 05:36 pm
La obra de Nicolás Guillén y su dimensión social, su impronta como intelectual y revolucionario en la Cuba pre y post revolucionaria y sus años de exilio, fueron algunas de las temáticas abordadas este miércoles por un panel de prestigiosos intelectuales e investigadores en el Coloquio homenaje al 111 aniversario de su natalicio, auspiciado por la Fundación que lleva su nombre.
En el encuentro, que tuvo lugar en la Sala Rubén Martínez Villena, de la Uneac (Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba), la Doctora Ana Cairo, investigadora, escritora y profesora titular de la Universidad de La Habana, significó la importancia de conocer y divulgar el quehacer de Guillén en las décadas de 1940 y 1950, un período que por lo general pasa inadvertido en la difusión de la vida y obra del prestigioso poeta.
Cairo lo define como un cronista de estas dos décadas, desde su poesía y su periodismo, aristas que desempeñó en esta etapa, fundamentalmente desde el periódico del Partido Comunista, Hoy. En este rotativo, publicaba tanto notas como décimas en las que muestra, según la investigadora, «una cara muy importante de la sociedad del 40».
A la relación de Ernesto Che Guevara con su obra se refirió en varias ocasiones, agregando el dato curioso de que el primer recital de poesía que ofreciera Guillén luego del triunfo revolucionario de 1959 fue a los soldados analfabetos del Ejército Rebelde en La Cabaña, invitado por el Che.
Al respecto, Nicolás Hernández Guillén, director de la Fundación, recordó que en el Diario de Campaña del Guerrillero Heroico en Bolivia, fueron encontrados poemas transcritos de diferentes autores: muchos de ellos eran de Guillén. Actualmente esos fragmentos del Diario del Che, donde se compilan los poemas que transcribiera, se agrupan bajo el título El libro verde, publicado por la Editorial Paidós.
En opinión de la prestigiosa investigadora, los estudios sobre el autor de Motivos de son, como los de muchos intelectuales del siglo XX, están comenzando ahora. Sobre todos ellos existen momentos más trabajados y momentos menos trabajados; en el caso de Guillén, aspectos como el periodismo y la carta son algunos en los que podría profundizarse, afirma.
El poemario La paloma de vuelo popular, publicado en Buenos Aires durante el exilio vivido por el poeta, cumplió 55 años de su salida a la luz. Con motivo de ello la escritora Denia García Ronda dedicó su intervención en el Coloquio a este momento de la vida del poeta, a la vez que realizó un recorrido por sus creaciones vinculada a la añoranza por la Isla, desde su condición de exiliado.
El autor del Libro de los sones continúa siendo, en opinión de Guillermo Rodríguez Rivera, escritor y profesor titular de la Universidad de La Habana, un referente social y político desde su poesía, pues los principios latinoamericanistas, de justicia social y soberanía, enarbolados por muchos países de América Latina en esta nueva época que viven, han estado presentes, de forma casi premonitoria, en una buena parte de su obra poética.
Desde la música, Guillén
Como parte del programa el grupo La otra mitad, quien desde hace algún tiempo colabora con la Fundación Nicolás Guillén en la musicalización de un grupo de obras del poeta, presentó a los participantes en la cita una muestra del trabajo realizado.
Según el director y vocalista de la joven agrupación, Maykel Espinosa Rodríguez, uno de los objetivos fundamentales de este proyecto es traer a la actualidad, desde un lenguaje tan universal como la música, la poesía de Guillén. Para ello tratamos de hacer una selección de obras que no fueran tan conocidas, por ejemplo, su poesía de amor; y en cuanto a géneros musicales, de fusionar estilos tradicionales y sonoridades contemporáneas, para que también a los jóvenes pudiera resultarle atractivo, explica.
Según Espinosa, la idea es grabar un disco con todo este trabajo, como una forma más de mantener vivo y actual su legado poético.
La Fundación Nicolás Guillén, como parte de su programa académico y de sus acciones de preservación, estudio y divulgación del legado literario del poeta, convoca cada año a eventos, paneles y conversatorios que reúnen a investigadores, escritores y admiradores de su patrimonio literario. También devienen espacios para profundizar en su legado social, político y ético, presente tanto en su obra artística como en su acción, explica el director de la institución.
Hoy el compromiso pasa por leer a Guillén, pero desde estudios contemporáneos, con códigos actuales, afirmó.
Lo que perseguimos al final, con nuestro trabajo, acotó, es mantenerlo como una figura actuante en la cultura de nuestra nación, y mantener vivas sus ideas y proyecciones sobre la cuestión racial, la equidad y la justicia social, el antiimperialismo, valores a los que el país no puede renunciar.
