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El artista recibió ayer el Premio Nacional de Artes Plásticas 2007
René de la Nuez, el creador de emblemáticos personajes que hicieron Revolución; el dibujante que supo hacer humor al lado de la muerte durante la guerra en Vietnam, y ayudó con sus dibujos a casi toda la guerrilla latinoamericana, recibió ayer el Premio Nacional de Artes Plásticas 2007, de manos de Abel Prieto, miembro del Buró Político y ministro de Cultura, y de Rubén del Valle, presidente del Consejo Nacional de Artes Plásticas.
El premio, instituido en 1994, es otorgado cada año a un artista cubano vivo residente en el país. El jurado de este año, presidido por Pedro Pablo Oliva, Premio Nacional de Artes Plásticas 2006, decidió dárselo a René de la Nuez en reconocimiento a sus más de 50 años de quehacer creativo y a la trascendencia, tanto artística como social, de una obra que ocupa un lugar privilegiado en el humorismo gráfico contemporáneo.
En el acto de entrega, que tuvo lugar en el Museo Nacional de Bellas Artes, René de la Nuez, a quien le hubiera gustado más hacer un dibujo que hablar, como él mismo dijo, se refirió a la significación que este medio expresivo ha tenido en el desarrollo y evolución de la especie humana.
«Lo que he hecho toda mi vida es dibujar la memoria histórica de mi pueblo y de la Revolución. Solo pido tener fuerzas para seguir haciéndolo y cuando ocurra lo inexorable morir dibujando», expresó quien es reconocido entre los cien más importantes caricaturistas del mundo.
Con la entrega de este premio, personificado en De la Nuez, la caricatura, muchas veces relegada dentro de las artes plásticas, ha recibido su justo reconocimiento y pasa a ocupar el lugar que le corresponde, destacó Adelaida de Juan en las palabras de elogio al artista.
La premiación devino emotivo encuentro entre amigos, familiares y personalidades de la cultura. Entre los invitados se encontraban algunos de los premios nacionales de Artes Plásticas y de Literatura y un creador que ha marcado con su especial poética a generaciones enteras: Silvio Rodríguez.
«Me dijeron que tú quieres que cante Llegué por San Antonio de los Baños. No me la sé. Pero te voy a cantar otra», dijo Silvio sonriendo a su coterráneo (ambos nacieron en ese pueblo habanero) y lo homenajeó con la canción Playa Girón.
