Asalto al Cuartel Moncada. Autor: Archivo de JR Publicado: 21/07/2023 | 01:09 am
…más meritorio todavía será siempre darle a un ideal todo
lo que se tiene y, además, la vida.
Fidel. La historia me absolverá
He aquí las fuerzas que nos hacen vivir: la dignidad, la libertad
y el valor
José Martí
La banda del Estado Mayor estaba formada a 30 metros de allí, observando todo.
Avanzando hacia dentro del cuartel cae Pepe Luis con un tiro en la pierna. Lo asesina después Río Chaviano.
A todo esto estaba tomada ya el ala derecha del edificio.
Al ver que no venían más refuerzos, salgo a la posta con Pedro Marrero. Me encontré con Fidel, quien con el arma en la mano alentaba a la gente a seguir adelante, mientras disparaba constantemente contra un artillero que en calzoncillos trataba de apoderarse de una ametralladora pesada, que desde la azotea de la jefatura dominaba todo el polígono.
Marrero cae atravesado por una ráfaga de 50 al subir cuatro o cinco escalones.
Al percatarse Fidel de que el factor sorpresa ha sido superado y que el ejército se recupera del ataque, y al no llegarnos los refuerzos extraviados en Santiago, da la orden de retirarse. Nos retiramos disparando.
En la máquina que yo voy, va Ciro Redondo manejando. Pancho González —de Puentes Grandes— y Chanes. Heridos, Reinaldo Benítez, Marino y Abelardo Crespo.
Nos dirigimos nuevamente a Siboney, y de ahí, a las lomas. Éramos 19 hombres en total los que seguimos para las lomas.
(Relato de José Suárez Blanco. Compilación del Centro de Estudios de Historia Militar de las FAR, tomo II. El Moncada: La acción).
Nota: Juventud Rebelde reproduce la sección Anecdotario, que publicó en julio de 1983 como recordación del asalto a los cuarteles Moncada y Carlos M. de Céspedes.