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El 90 por ciento de las causas de los incendios forestales en el país son de origen humano, aseguró este miércoles el coronel Manuel Lama Gómez, jefe del Cuerpo de Guardabosques de Cuba (CGC), quien en conferencia de prensa, alertó sobre la baja percepción de la población del peligro y daño que ocasionan estos siniestros.
En tal sentido, apuntó que cada cinco años es analizado el comportamiento de los incendios y hasta el momento persisten las mismas causas de origen: la quema no autorizada y sin adoptar medidas de seguridad, cazadores y pescadores furtivos que emplean el fuego, la circulación de vehículos con desperfectos técnicos en el tubo de escape, fumadores y la irresponsabilidad de algunos.
Al presentar la campaña de protección contra incendios forestales del país para 2023, Lama Gómez explicó que se encuentra marcada por el período de alta peligrosidad desde el 1ro. de enero hasta el 31 de mayo, y advirtió sobre la existencia de un peligro potencial de que ocurran eventos de gran magnitud en los meses de marzo y abril, etapa en que la sequía y otros factores climáticos los favorecen.
La Mayor de las Antillas, a diferencia de varios países del mundo, cuenta con una Estrategia y Programa Nacional para la Gestión y Manejo del Fuego en los bosques de la República de Cuba del 2018-2025, además de la Directiva No.1 para la Reducción de Desastres Naturales, mecanismos que han sido efectivos durante más de diez años.
«El CGC posee más coraje que técnica para enfrentar los siniestros. En él se reunen alrededor de 600 fuerzas eventuales que llamamos cuando ocurren estos», afirmó Lama Gómez. También detalló que en nuestro país existe un sistema de protección contra incendios integrado por los organismos de la Administración Central del Estado y los órganos e instituciones estatales.
El llamado ante esta nueva campaña, expresó, es a la cooperación y la creación de una conciencia social a través de una mejor comunicación para poner freno a las llamas, además de la necesidad de extremar el cumplimiento de las medidas preventivas para la protección de nuestros bosques como un valioso patrimonio ecológico y con funciones sociales.
