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La doctora en Ciencias de la Comunicación, Rosa Miriam Elizalde, propuso las primeras ideas a tener en cuenta en la confección de una ley de prensa para el país. Autor: Abel Rojas Barallobre Publicado: 21/09/2017 | 06:23 pm
Una ley de prensa en Cuba necesita concebirse sobre las bases de la integración de las agendas política, mediática y ciudadana, afirmó en entrevista a Prensa Latina la doctora en Ciencias de la Comunicación Rosa Miriam Elizalde, informa PL.
En el marco del VIII Encuentro Internacional de Investigadores y Estudiosos de la Información y la Comunicación (ICOM), la profesora de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana, aprovechó para proponer las primeras ideas a tener en cuenta en la confección de una ley de prensa para el país.
El proyecto de un estatuto para la comunicación lleva años en planes, salen normativas y resoluciones del buró político del Partido Comunista de Cuba (PCC), pero carecemos aún de una legislación en la cual se valore la unión de medios, contenidos e infraestructura, añadió Elizalde.
Asimismo, señaló que cualquier política debe «refrendar el espacio de la comunicación como un lugar para la participación ciudadana», donde converjan todos los actores de la sociedad.
Recalcó la importancia de diseñar una ley consecuente con los tiempos actuales en los que Cuba restablece relaciones políticas con Estados Unidos y la era digital marca las reformas informativas.
«El debate público es el único sitio donde pueden defenderse los derechos y las necesidades de comunicación y evitar ser sesgados por el mercado norteamericano».
En cuanto a las preocupaciones más significativas de los periodistas cubanos, la también periodista y editora del sitio Cubadebate, mencionó la excesiva regulación externa de los contenidos, y la burocratización e incapacidad de entender la inserción en el espacio digital.
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Además del salario de los periodistas ante un mercado privado emergente, «que compite de manera feroz y desleal con el sistema de medios públicos», y el reconocimiento de los jóvenes como parte del proceso de gestión, más enfocado en la demanda que en la oferta informativa.
Por otro lado resaltó que los jóvenes periodistas y comunicadores, gestores de los llamados medios «alternativos» en Cuba, demuestran el enorme talento producido en las universidades del país.
