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Botellas al Mar dedicadas a Martí. Autor: Humberto Líster Publicado: 21/09/2017 | 06:09 pm
ARTEMISA.— El Apóstol, siempre motivo de inspiración, será esta vez quien convoque en Mariel a todos los interesados en participar en el evento Botellas al Mar, cuya inauguración tendrá lugar el 21 de mayo a las 10 de la mañana, según precisó Gerlys Álvarez, presidente de la sección de Artes Plásticas de la filial de la Uneac en la provincia de Artemisa.
El programa de actividades comprende la presentación de la banda de concierto, la inauguración de una exposición en homenaje a Martí, una descarga con trovadores, así como la presentación de libros y lectura de poesías.
Precisó que con la unión de Cultura, la Uneac de la provincia de Artemisa y la filial de la Sociedad Cultural José Martí, el evento busca revitalizarse y alcanzar las dimensiones de otrora, cuando llegó a ser un espacio extensivo del Festival Internacional de Poesía de La Habana, donde poetas de otros países compartían con los marieleños su quehacer.
Paralelo a este evento, y también dedicado a nuestro Héroe Nacional, en el 120 aniversario de su muerte, la Uneac de la provincia, de conjunto con la Sociedad Cultural José Martí a nivel de país, organizaron una exposición en la Casa Natal del Apóstol que quedará inaugurada el 19 de mayo a las tres de la tarde.
La muestra titulada Sé de un pintor atrevido, la conforman obras de 22 artistas de la provincia de Artemisa.
Botellas al mar, una idea del escritor Jesús Sama Pacheco, nació por el 2005 como un proyecto de la Uneac y desde entonces apostó por la grandeza, uniendo en comunidades de Bauta y Mariel la literatura, específicamente la poesía, con las artes plásticas y la música.
Al finalizar el evento quedaban los murales como constancia de cuanto acontecía en dos días; era un suceso de pueblo, donde todos los actores de la comunidad se juntaban y daban lo mejor de sí. Las botellas decoradas artísticamente se convirtieron en el ícono fundamental y en original souvenir para el visitante y, si bien la intención inicial de estas era albergar mensajes y poemas para después arrojarlos al mar eso solo sucedió en la primera edición, pues era muy engorroso conseguir una embarcación que llevara a los artistas mar adentro para arrojarlas.
Desgraciadamente, edición tras edición fue decayendo el apoyo y comenzó a debilitarse el evento al punto de ser criticado como un acto antiecológico, por el largo período que demora el vidrio en degradarse.
