SANCTI SPÍRITUS.— Justo cuando esta central provincia alcanzó la cifra de un millar de nacimientos en el primer trimestre del año, también se ratificó como la de más baja mortalidad infantil en todo el país durante ese lapso, con cero fallecidos por cada mil nacidos vivos.
La tendencia a decrecer que siguió este indicador en el año 2012 —fue el más bajo de la historia espirituana con 2,8—, se complementó con otros resultados: la mortalidad preescolar y la de los menores de cinco años permanecen en cero, mientras que se reduce de forma considerable el número de niños con bajo peso, argumentó Pável Nodalse Fleites, jefe de Departamento de Atención al Programa Materno Infantil (PAMI) en Sancti Spíritus.
El especialista agregó que en igual fecha del año anterior existía una mortalidad de 4,7 fallecidos por cada mil nacidos vivos que, aunque baja, aconsejó tomar una serie de medidas técnicas, organizativas y de control, resumidas en pesquisas constantes a mujeres en edad fértil y en un mayor compromiso multisectorial para con esta labor en todo el territorio.
El PAMI incluye realizar la cervicometría en el período intermedio de gestación a las embarazadas con amenazas de parto pretérmino, los ultrasonidos a las encintas con altos índices de masa corporal, el seguimiento a las dificultades nutricionales y a la hipertensión gestacional, y la constante educación sanitaria entre los espirituanos, precisó Nodalse.