SANTIAGO DE CUBA.— La contralora general de la República de Cuba, Gladys Bejerano Portela, exhortó a los auditores a prepararse más para ejercer mejor la labor de fiscalización en la lucha que libra el país contra las ilegalidades y hechos delictivos, así como también a continuar controlando sobre la base de la calidad y eficiencia en el trabajo.
Lo anterior lo expresó durante la asamblea de balance de la Contraloría de Santiago de Cuba sobre el año 2012, con la que concluyó el proceso en el país a ese nivel.
La también Vicepresidenta del Consejo de Estado reconoció a los auditores del territorio santiaguero por el destacado trabajo realizado durante el proceso de recuperación después del paso del huracán Sandy por esta región, en octubre último.
Bejerano Portela señaló que la autoridad y credibilidad del auditor es mayor en tanto más preparación tenga al momento de iniciar una investigación con la búsqueda previa de abundante información, el conocimiento de antecedentes y el estudio de las normas específicas de la actividad.
Destacó la necesidad de tener presentes documentos indispensables, como los Lineamientos Económicos y Sociales del Partido y la Revolución, aprobados en el VI Congreso del PCC, las Normas Cubanas de Auditoría, la Resolución No. 60 acerca del Sistema de Control Interno y el Código de Ética.
«Controlar es comprobar y resulta actualmente una palabra de orden», afirmó Bejerano Portela, quien argumentó que las cosas bien hechas, con autoridad, respeto y ética son constructivas y educativas; por tanto, una auditoría constituye una oportunidad y no un acto de agresión.
En el encuentro los auditores santiagueros reflexionaron sobre temas esenciales para perfeccionar el trabajo de la institución, como son la capacitación y autopreparación, el completamiento de plantillas, la atención a los problemas de la población, las supervisiones y acciones del control de las auditorías y el fortalecimiento integral del sistema, sobre la base de un mayor vínculo de trabajo con la Fiscalía y el Ministerio del Interior.