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Lisbeth Cordero (al centro), la avileña que representará a Cuba en el XVII Festival Mudial de la Juventud y los Estudiantes. Autor: Luis Raúl Vázquez Muñoz Publicado: 21/09/2017 | 05:03 pm
CIEGO DE ÁVILA.— Primero fue el Congreso de la UJC. Y ahora el Festival. En muy poco tiempo Lisbeth Cordero Vega ha recibido dos sorpresas que nunca imaginó alcanzar en la vida, como ella confiesa. Esta joven de 29 años, especialista en Normalización del Trabajo en la Empresa de Cepillos y Artículos Plásticos Juan Antonio Márquez, de Ciego de Ávila, ahora es una de las delegadas de la provincia de Ciego de Ávila al XVII Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes, a desarrollarse en la ciudad de Pretoria, Sudáfrica, entre el 13 y 21 de diciembre de este año.
«Cuando me lo dijeron, me quedé en una pieza —dice—. Hay cosas en la vida que una persona nunca espera, tampoco piensas en ella y de pronto llegan, te producen una alegría tremenda y una al final piensa: “Bueno, ¿por qué fui yo?, ¿por qué no otro compañero?”».
Una de las respuestas está en los aplausos de sus compañeros cuando hicieron el anuncio, en la misma entrada de las naves de la fábrica. Es el mejor reconocimiento, porque Lisbeth une a su exigencia la calidad del trabajo, el tacto y los argumentos a la hora de discutir con sus compañeros cuando un artículo no sale bien de la línea de producción y hay que corregir los parámetros de funcionamiento de las máquinas.
También está su entrega. Porque ella no ha sido una trabajadora dedicada a cumplir estrictamente con su papel y luego retirarse a la casa. Los aplausos de sus compañeros mostraron igualmente la admiración por la ex secretaria del Sindicato de la fábrica y hasta hace poco secretaria del Comité de la Juventud. Fue el reconocimiento a una muchacha que cumple con su deber sencilla y naturalmente. Sin halagos y con humildad.
