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LAS TUNAS.— La estrategia adoptada por la dirección del país para regular y optimizar la utilización de portadores energéticos mediante la reducción del consumo eléctrico en el sector estatal arrojan aquí positivos saldos, pues el territorio ahorró una cifra superior a los 2 000 megawatt-hora en la primera quincena del mes de junio.
El guarismo reflejado por la mitad inicial del sexto mes representa el 90 por ciento del plan establecido para la provincia en la etapa, resultado que supera en el orden del aprovechamiento y la eficiencia al mes de mayo, donde Las Tunas exhibió un sobregiro del nueve por ciento por encima del gasto energético que le fue planificado.
Los ocho municipios de la provincia se mantienen dentro del rango de cumplidores con sus respectivas planificaciones de consumo. En esa conquista se distingue el rol que desempeñan los inspectores, quienes controlan día por día tareas tales como la utilización reglamentada de equipos de climatización y el ajuste de los planes de producción y servicios a las necesidades de los centros asistenciales.
Un buen resultado es el de la empresa de aceros inoxidables ACINOX, cuyos hornos y plantas consumen históricamente el 20 por ciento de la energía tunera. La conforman acerías para producir palanquillas de acero y barras corrugadas (cabillas), lo cual potencia la importancia de ajustarse al plan actual, que es de 250 megawatt-hora cada día.
De enero a mayo esta empresa dejó de consumir 1 700 megawatt. El esfuerzo de su colectivo, integrado por unos 1 180 trabajadores, tiene el propósito de estimular a toda costa el ahorro, pero también de llevar a la mínima expresión las afectaciones a la producción, pues desde que se implantaron las medidas para reducir el consumo se dejó de producir como promedio unas 100 toneladas diariamente.
Otros centros e instituciones importantes de la provincia —también grandes consumidores de energía— extreman precauciones en el ahorro. Son los casos del hospital provincial Doctor Ernesto Guevara de la Serna, las empresas azucareras Majibacoa y Antonio Guiteras y la fábrica de tableros de bagazo Máximo Gómez.
