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Cada día mueren en el mundo por causas totalmente evitables unos 35 000 niños, diez veces el número de fallecidos en el atentado contra las Torres Gemelas, denunció José Juan Ortiz, representante en Cuba del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
El funcionario apuntó lo vergonzosa que resulta la pasividad con la que la comunidad internacional y los medios de comunicación asumen semejante realidad.
Estadísticas expuestas por el funcionario, en la capital, durante la presentación del informe Estado Mundial de la Infancia 2009, muestran un descenso de entre el 16 y 18 por ciento, con respecto al año 2000, en atención y salud de la infancia y la maternidad.
«Conocemos el problema, las causas y los afectados, pero no somos capaces de resolver la situación por falta de voluntad política», comentó.
Añadió que es necesario focalizar la atención hacia los más sufridos y dejar de aplicar las supuestamente extintas políticas coloniales, pues se sigue marginando a sectores de la población como los indígenas y afrodescendientes.
«Cuba, a pesar de ser un país pobre, posee índices de salud iguales a los del Primer Mundo, porque hay voluntad y decisión política. Las cifras claramente lo demuestran: una tasa de mortalidad infantil de 4,7 por cada mil nacidos vivos y 26 de los 169 municipios presentan mortalidad cero», subrayó Ortiz.
La denuncia de UNICEF dirigida a la comunidad internacional exhorta a los estados a cumplir con la máxima de «los niños y las niñas primero».
