La tecla del duende
Al día siguiente de la convocatoria ya llegaba el primer sobre para nuestro concurso Eternidad del amor. El corazón no espera, porque desespera. Y así han seguido llegando de tal suerte que nuestro buzón electrónico crece en contentura. Ante la provocación de una joven estudiante, decidimos despedir el 2012 con el concurso referido. Para los que vieron la Tecla de la semana pasada, aquí van otra vez las ocurrentes reglas del juego:
•Cada concursante debe escribir en no más de una cuartilla, empleando cualquier género, sobre el Amor eterno. Puede contar historias reales o mezclarlas con la fantasía.
•Aceptaremos envíos hasta el martes 19 de febrero de 2013. La premiación será en marzo. Los textos pueden remitirse al correo electrónico que aparece en la columna, enviarse a la dirección postal de JR o entregarse personalmente en la redacción del diario.
•Los que con más originalidad y belleza aborden el tema, recibirán un original de ese fraterno amigo que responde al seudónimo de Diablo Ilustrado y un original del maestro de la plástica Kamil Bullaudy.
Foto en un puente de Bella y yo cuando novios. Contra el pretil estamos. Con mi brazo/ tus hombros frágiles estrecho. Abajo,/ muy abajo del puente, está el abismo.
Tú levantas tu rostro delicado/ hacia mis ojos serios. Tú confías/ en que puedo ampararte del vacío./ Muy estrecha conmigo, tú sonríes.
Pulcra y esbelta, qué feliz me miras./ Muy junta a mi costado, tú de blanco./ Nada te digo, amor, aunque ahora mismo/ otra sima se ha abierto en el instante donde fuimos los dos un hoy eterno./ Un poco más/ — y todo es ya el pasado.
Retrato de Bella con nuestros tres hijos. Estás sentada entre tus hijos, todos,/ sobre la fresca hierba del jardín./ En tu rostro hay el suave, tierno orgullo,/ que solo vemos cuando al fin desciende/ sobre una joven su alta perfección.
No estoy allí contigo, mi señora,/ porque es el tiempo de tu majestad./ ¿Cómo es posible que me sobrecoja/ solo tu lindo rostro de mujer? (Eliseo Diego)
Los ocurrentes del Yayabo celebraron su fin de año con brindis de altura en la galería Oscar Fernández Morera. En Holguín, Matanzas, Las Tunas, dondequiera que conspiran y abrazan los tecleros, también hubo festejo. ¿Qué nos traerá el 2013? Bueno, en todo caso, que nos sorprenda queriendo.
Oscar: No importan los baches del camino: tu Astro saber llegó seguro a la estación de la licenciatura. Felicidades.
Llegarán los grandes días, como monedas nuevas rodando sobre la vida… Regino Pedroso
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