Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Todavía Martha de la Caridad Estévez Sánchez no puede explicarse a ciencia cierta lo que sucedió, y sigue esperando una respuesta definitiva allá en su domicilio, en Manuel Pedreira No. 112, entre Lora y Masó, en el reparto Castro de la ciudad de Bayamo.

Todo comenzó el 28 de enero del presente año, cuando ella consultó en un cajero electrónico los respectivos saldos en su tarjeta magnética en MLC y en la de moneda nacional. En la primera faltaban 30 dólares, sustraídos el 15 de enero. Y en la segunda aparecían una extracción de 11 625 pesos que ella no había realizado, y dos transferencias de 9 600 y 18 300 pesos, de las cuales no tenía conocimiento hasta ese momento.

Al siguiente día, Martha fue a la sucursal de Bandec, y se entrevistó con la gerente, para informarle de las operaciones realizadas en sus tarjetas sin su conocimiento. Y recibió información sobre el destino de los 30 dólares: Se encontraban en la tarjeta de una señora de Pinar del Río contra la que debía establecer una acusación en la PNR Provincial, la cual hizo el 1ro. de febrero.

Pero no recibió respuesta sobre la tarjeta en moneda nacional, pues estaba y permanece bloqueada, así como el Transfermóvil. No obstante, le orientaron que se presentara en Bandec Provincial, y allí debían darle respuesta, pues Bandec Nacional es quien bloquea las tarjetas.

Durante este tiempo ella se ha dirigido en varias ocasiones a Bandec Provincial. Y el 5 de marzo la citaron para firmar un documento donde declaraba que estaba dispuesta a devolver el dinero que no es suyo. Eso ya ella lo había expresado verbalmente desde el 29 de enero en el propio banco.

El 5 de abril la visitó en su casa un agente de la PNR y le informó verbalmente que debía viajar con urgencia a Guanajay, Artemisa, para enfrentar un proceso judicial ante la acusación de una persona a la que supuestamente «robó» 9 600 pesos en moneda nacional, que fueron transferidos a su tarjeta. Que la ciudadana reclamaba la devolución de su dinero y ella estaba circulada en todo el país, por dicho robo. Al fin, la Policía le informó que debía permanecer localizable en su domicilio, pues no viajaría en ese momento por la situación epidémica que presenta el país.

Durante todo este tiempo, Martha no recibió respuesta de los funcionarios de Bandec a los cuales se ha dirigido reiteradamente. Y el 27 de abril, la Policía volvió a su casa, a precisarle que entonces sí debía viajar a Guanajay por la acusación antes referida y que pronto le sacarían pasaje para ese fin.

Ese mismo día, Martha se presentó en Bandec Provincial, donde la asesora jurídica le orientó firmar un documento declarando que estaba dispuesta a devolver a los ciudadanos afectados el dinero que fue transferido a su tarjeta; lo que ya ella había declarado anteriormente de forma verbal y escrita.

El 28 de abril la jurídica de Bandec Provincial le informó que ya habían sido transferidos los 30 dólares a su tarjeta en moneda libremente convertible, e igualmente el dinero a los afectados; pero que los 11 625 pesos extraídos de su tarjeta en moneda nacional aún no tenían respuesta, y esta continuaba bloqueada, pero no depende de ellos en la Provincia, sino de Bandec Nacional.

«Durante este tiempo he continuado comunicándome con el director y la asesora jurídica de Bandec Provincial para ver si tienen respuesta de mi tarjeta y mi dinero. Y nada. El 29 de junio se presentó a mi casa de nuevo un agente para conducirme a la PNR Provincial a declarar otra vez porque continuaba circulada en el país acusada de robo por la ciudadana de Guanajay.

«En fin, me siento víctima de la ineficiencia, la incapacidad o los ardides de delincuentes. Requiero la intervención de las autoridades de Bandec, Telecomunicaciones y la PNR para que sea aclarada esta situación y se dé fin a esta pesadilla», concluye.