Acuse de recibo
El pasado 12 de abril, y desde el municipio capitalino de Plaza de la Revolución, Zoila Rosa Rodríguez lamentaba aquí, en nombre de más de cien ancianos jubilados y beneficiarios de la Seguridad Social, que se hubiera cerrado la cercana Cadeca de 19, entre A y B, en el Vedado, la única existente en esa zona.
Refería la señora que a partir del cierre, del cual no sabían los delegados de las respectivas circunscripciones, los veteranos tendrían que trasladarse a distancias imposibles de recorrer por un anciano, y atravesar calles de mucho tráfico, para cobrar sus respectivas pensiones. Y solicitaban la revocación de la medida.
Al respecto, responde Nilber Acuña Aguilar, director territorial de Casas de Cambio S.A. (Cadeca) en La Habana. Y comienza explicando que esa es una entidad financiera no bancaria, cuya misión fundamental es la compra y venta de monedas a personas naturales; aunque en los últimos años ha ido incorporando otros servicios adicionales de pagos y cobros por cuenta de terceros, para facilitar a la población y a entidades sus operaciones habituales.
E informa que en las últimas semanas en la capital se han visto obligados a cerrar 14 casas de cambio que funcionaban en contenedores (caravanes) dadas las deficientes condiciones estructurales de las mismas, luego de más de 20 años de explotación.
Dichos contenedores, precisa, no reúnen las condiciones de seguridad imprescindibles para garantizar la integridad del efectivo y de otros activos; además de no poseer las condiciones higiénico-sanitarias necesarias para que sus trabajadores puedan ejercer sus funciones. Además, esos contenedores ejecutaban un bajo nivel de operaciones, que generaban pérdidas a la entidad. Y en algunos de ellos se registraron intentos de acceso en horarios nocturnos por malhechores malintencionados.
Al respecto, expresa, durante años se ha estado intercambiando con los gobiernos municipales la posibilidad de reparar locales en desuso, para adecuarlos a oficinas de Cadeca, en los cuales se pudiera contar con las condiciones de seguridad e higiénico-sanitarias imprescindibles, y así ampliar los servicios a la población en mejores condiciones.
Puntualiza que todos los cierres ejecutados se han notificado oportunamente a los gobiernos de cada localidad, y se informaron con antelación a los clientes habituales con carteles que anunciaban la decisión y la fecha de cierre. Asimismo, se informó en cada caso la oficina más cercana donde podía recibirse el servicio.
«Nuestra aspiración, afirma, y en lo cual trabajamos con los presidentes de los gobiernos municipales, es lograr locales que adaptemos, para poder mantener la presencia de esta institución, y ampliar la gama de servicios que brindamos en cada lugar, donde la población apuesta por nuestros servicios».
Añade que hasta la fecha, en las oficinas que cuentan con las condiciones necesarias, Cadeca brinda los servicios de pago de remesas de Western Union, recepción de depósitos de entidades para acreditar en sus cuentas bancarias, cobros de impuestos y contribuciones al sector no estatal, pago de pensiones de seguridad social a jubilados, además de la compra y venta de monedas nacionales o extranjeras.
También, laboran en la instrumentación de otros servicios de cobros y pagos por cuenta de terceros, así como en alianzas con algunas entidades, para ampliar la red de servicios en todo el país, y fundamentalmente en la capital.
Todos los servicios que presta Cadeca, manifiesta, también pueden recibirse en los bancos cercanos; y algunos de ellos utilizando los medios y canales de pago electrónicos.
Aprovecha Acuña para manifestar a los clientes de Cadeca que, cuando exista cualquier situación referida a los servicios de esa entidad en la capital, agradecerán que se comuniquen con ellos, para el esclarecimiento oportuno de las informaciones, y así poder trasladar la debida respuesta.