SANCTI SPÍRITUS.- Con el propósito de disminuir, desde la innovación, los tiempos de implementación de las energías renovables a partir de acciones de capacitación y desarrollo, labora la Dirección de Investigaciones aplicadas de la Universidad José Martí (UNISS) de esta provincia.
De acuerdo con Osvaldo Romero, director de la referida estructura universitaria espirituana, esta área, de conjunto con el Centro de Estudios de Energía y Procesos Industriales, tiene el encargo de atender en todo el país lo que en materia de investigación científica se hace para mermar los tiempos de implementación del biogás, biocombustibles, biomasa no cañera y molinos de viento para la agricultura.
La decisión surgió a partir de un decreto gubernamental, el cual creó siete grupos de trabajo para la implementación de energía renovable y confirió el número seis a la UNISS para coordinar el trabajo de las casas de altos estudios de la isla.
Al mismo tiempo —asegura el directivo—, el centro yayabero labora de conjunto con la Universidad Central «Marta Abreu» de Las Villas (UCLV) para la implementación de la cogeneración en la industria azucarera.
A juicio de Osvaldo Romero, otra de las acciones que realizan los investigadores espirituanos es la implementación de una moderna planta de biogás a instalar en la Empresa Agroindustrial de Granos Sur de El Jíbaro para generar electricidad a partir del procesamiento de los residuos o impurezas provenientes del secado del arroz. La novedosa tecnología será emplazada, en el municipio de La Sierpe, donde contribuirá a ahorrar combustible y disminuir los riesgos ambientales.
Dijo, además, que la universidad espirituana cuenta con una propuesta para generar 330 días en un central azucarero con bagazo.
«Ya está demostrada y probada. En estos momentos estamos defendiendo lo que se necesita para su equipamiento e inversión», acotó.
El director del Centro de investigaciones aplicadas de la UNISS agregó que se trabaja, además, en la utilización de los residuos del biogás para contribuir a la sostenibilidad de la producción de alimentos del territorio.
Ese trabajo forma parte de un mega proyecto del centro bajo el nombre Estudio para la seguridad y soberanía alimentaria para la región central del país, y que tiene como fin disminuir los agroquímicos que se utilizan en la agricultura y busca obtener alimentos que no estén contaminados por los químicos. Para ello, se vinculará al accionar de otros proyectos y entidades del territorio.