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Las enfermedades cardiovasculares, aumento de peso y más posibilidades de desarrollar obesidad, son algunas de las consecuencias de la comida chatarra cuando la comemos con mucha frecuencia, y sin equilibrarla con alimentos nutritivos y saludables. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 05:36 pm
Un equipo de investigadores de las universidades de Edimburgo y de Aberdeen, en Escocia, determinó que la comida basura, como pasteles, papas fritas, hamburguesas, galletas y bebidas gaseosas, aumentan el riesgo de desarrollar cáncer intestinal, informa TeleSur.
El estudio realizado reveló el alto riesgo de sufrir cáncer de intestino debido al uso de alimentos energéticos, además de considerar otros factores como tabaquismo e historia familiar de cánceres.
Los investigadores compararon la dieta de dos mil pacientes diagnosticados de cáncer con la de personas sin esta enfermedad, de acuerdo al informe publicado por la Revista Europa para la Prevención del Cáncer (European Journal of Cancer Prevention).
En cifras, las personas que consumen con frecuencia galletas, chocolate, pasteles, frutos secos y patatas fritas son un 18 por ciento más propensas a contraer cáncer intestinal.
Por otro lado, los científicos descubrieron que los refrescos aumentan en un 12 por ciento el riesgo de desarrollar cáncer de intestino, mientras que el café parece proteger el cuerpo humano contra la aparición de dicha condición médica.
Los científicos determinaron que una dieta occidental rica en dulces, comidas fritas y procesadas, aumentaría el riesgo de muerte prematura. Por ello, recomendaron a las personas «renunciar completamente a la comida basura, las bebidas azucaradas y los dulces».
En ese orden de ideas, también revelaron que el consumo de pescado también ha estado vinculado al cáncer intestinal, porque la mayoría de las personas lo cocinan de manera poco saludable.
Aunque los investigadores no pueden explicar por qué el café beneficia el cuerpo humano, creen que varios compuestos químicos presentes en esta bebida mantienen activas las entrañas e impiden la formación de tumores.
Para finalizar, el estudio expone que aún se necesitan más investigaciones, antes de explicar cómo y por qué dichos alimentos y bebidas desencadenan cáncer de intestino.
