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Cuba desarrolla proyectos para el control en fronteras y la modernización de la seguridad física en las instalaciones. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 05:24 pm
VIENA, septiembre 11.– Cuba destacó este martes su nivel de cooperación en materia de seguridad física nuclear alcanzado con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), durante la segunda jornada de la Junta de Gobernadores de esa entidad.
Al intervenir en la sesión, el representante cubano ante el foro, Rodolfo Benítez, calificó de satisfactoria la implementación de un Plan Integral de Apoyo a la Seguridad Física Nuclear suscrito por su país en marzo último con la OIEA, reportó Prensa Latina.
En particular, el gobernador ante el Organismo conexo al sistema de Naciones Unidas resaltó los nexos en la ejecución de proyectos cubanos para el control en fronteras y la modernización de la seguridad física en las instalaciones con fuentes radiactivas de categoría uno y dos.
Benítez mencionó además que la nación caribeña acogió en 2012 un curso regional de capacitación sobre buenas prácticas en Seguridad Física Nuclear, en el cual participaron 18 expertos del área.
El curso propició un fructífero intercambio de experiencias entre los especialistas de la región y expertos del OIEA, y en tal sentido, consideramos la formación de capacidades una parte fundamental de la asistencia del Organismo, apuntó.
De acuerdo con el funcionario, la isla alienta a impulsar las acciones de preparación en el sector.
En su intervención ante la Junta, Benítez saludó los preparativos de la OIEA para realizar aquí en julio de 2013 la Conferencia Internacional sobre Seguridad Física Nuclear, con la participación de todos los Estados Miembros.
La víspera, el gobernador cubano denunció durante la instalación del foro las restricciones que sufre la isla en el acceso a materiales radiactivos requeridos para la salud y la seguridad alimentaria, como resultado del bloqueo de Estados Unidos.
En ese sentido, recordó que el recrudecimiento del cerco aplicado por Washington -por más de medio siglo- impide a navieras de terceros países atracar en puertos norteamericanos durante un período de seis meses si han tocado puertos cubanos, lo cual afecta el suministro de materiales radiactivos para servicios a la población.
