La tecla del duende
Con la emoción hecha música y versos en manos de Julio Alberto Cumberbatch y su esposa Tomasa González, ambos del grupo Ala Décima, la tertulia capitalina festejó a los papás. De Julio, que une al don de la palabra el color de la simpatía, son estos versos titulados: Parábola del castigo.
Si yo pudiera salir embarazado insistiría sin rubor:/ ¡Ven, fecúndame!/ Tomaría «conceptivos» y tras tus líquidos buscara/ el óvulo que se hundiera en mi piel con suerte y magia…/ Pero… ya ves, mujer, he sido castigado./ Así fue mi Dios de injusto con los hombres: «Parirás con dolor»,/ le dijo a Eva y me negó lo que, al verte,/ en mi rara cabeza se conjuga.
Mirarme nueve meses; decir: «te llevo dentro»/ y el barrio —dividido— murmurando: «Descarado» o «valiente»/ en fin ¿qué importa?/ …Y lo desearía no por bondades que supone/ el embarazo de un hombre solitario;/ deferencias que incluso me otorgaran las mujeres. Ni por cuidados de la gestación,/ mucho menos porque del parto, el dolor, supone el privilegio:/ … «Yo te parí ¡Cabrón!» decía mi madre…/ Pero en ti, mujer, no alucino un deseo que demuestre/ hasta dónde me flagelo...
Si por común esta afección fuera musitara (yo) mi canto más sublime,/ el más escandaloso poemario, pero es más fuerte,/ mujer, mucho más fuerte, casi envidia/ (o frustración) el sentimiento que ignoras y te poetizo…
Si pudiera salir embarazado/ te pariera una niña; ¡LA MÁS HEMBRA!/ aunque no le concedieras tu apellido.
Hasta la capital teclera en el centro mismo del caimán, Guaracabulla, en el villaclareño Placetas, llegaremos el domingo 10 de julio para compartir ocurrencias. Ya se alistan inspiraciones en las peñas de todo el país para asistir a la megatertulia.
Y los tecleros de Matanzas, se encontrarán este domingo en el museo Palacio de Junco para hablar de la infancia, los padres y el medio ambiente.
Papá: Aunque no pronuncias bien la r, contigo hemos andado los trillos de la responsabilidad y el respeto, junto al más silencioso amor. Felicidades. HJ
JLSH: Eres lo mejor que ha pasado en mi vida… No me olvides. YPM
Cañón: Hasta que no escuche tu voz no me disparo. La Bala
M. Albella: Sigo pensando en ti como las olas del mar, que se envuelven en sí mismas y se olvidan de nadar. A. Alemany
Mi princesa: Si perdiera la memoria, lo único que recordaría sería que te amo. Diasmani
Educar no es dar «carrera» para vivir; sino templar el alma para las dificultades de la vida. Pitágoras